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NFL | SUPER BOWL

Travis gana la batalla de los Kelce: “Que te j..., enhorabuena”

El tight end de los Kansas City Chiefs, que logró un touchdown, gana su segunda Super Bowl delante de su hermano Jason, de los Eagles.

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Travis gana la batalla de los Kelce: “Que te j..., enhorabuena”

Ya de por sí, la Super Bowl no es un partido cualquiera. Pero esta edición de la final de la NFL era más especial todavía para la familia Kelce, que tuvo a dos protagonistas sobre el verde del State Farm Stadium: Travis, tight end de los Kansas City Chiefs, y Jason, center de los Philadelphia Eagles. Se convirtieron en la primera pareja de hermanos que jugaba una misma Super Bowl, y la mejor parte se la llevó el de los Chiefs, que sumó el segundo anillo de su carrera.

Los dos hermanos fueron protagonistas de la final. Travis consiguió un touchdown de recepción en el primer cuarto y finalizó el partido con seis recepciones para 81 yardas. Jason, por su parte, protegió a las mil maravillas a su quarterback y fue clave en el buen puñado de sneaks que los Eagles realizaron y en los que el center es vital. Ambos pertenecen a la élite de la NFL en sus respectivas posiciones, y lo demostraron en el escenario principal que ofrece la liga. La relación entre ambos es inmejorable, y a la vista queda en el pódcast que comparten, ‘New Heights’, el cual ya está entre los más escuchados en Estados Unidos.

Quien tenía asegurado el anillo era ‘mamá Kelce’, Donna, que acudió al partido con una camiseta y una chaqueta en la que cada mitad lucía los colores de uno de sus dos hijos. Vivió el partido en el palco, al lado del comisionado de la NFL, Roger Goodell, y bajó al césped para felicitar a Travis y consolar a Jason. Cada hermano ya contaba con un anillo en su palmarés, y acabó siendo el de los Chiefs el que amplió su vitrina.

Tras la apretada victoria de Kansas City, los hermanos Kelce dejaron un bonito momento al saludarse bajo la lluvia de confeti. “Que te j..., enhorabuena”, le dijo Jason, el mayor, a Travis. El de los Eagles, a pesar de la decepción de la derrota, no se quiso perder el momento en el que su hermano alzaba al cielo el trofeo Vince Lombardi, y fue el último jugador de Philadelphia en abandonar el campo.

Minutos después, Travis Kelce fue preguntado acerca de la experiencia junto con su hermano y respondió muy emocionado. “No le podía decir mucho en una situación así. Bromeas mucho con que quieres ganar a tu hermano en un escenario así, pero es una sensación extraña. Son un gran equipo, todo se ha decidido al final y los Eagles se merecen respeto. No hay mucho que le pueda decir más allá de que lo quiero y que ha hecho una grandísima temporada”, afirmó el de los Chiefs. Una Super Bowl que ha sido cuestión de familia.