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AJEDREZ

Nepomniachtchi saca a Ding del tablero

El jugador chino sorprendió con una preparación interesante, pero quedó prácticamente perdido en apenas dos horas. Nepo ajustició con maestría.

Actualizado a
Nepomniachtchi saca a Ding del tablero
FIDE/David Llada

Ding Liren no deja de actuar de una forma extraña. Si tras su primera partida hacía públicos sus problemas de ansiedad por la presión del torneo, durante el segundo envite apenas compareció sobre el tablero. No solo es que Nepomniachtchi le haya barrido, sino que el número tres del mundo apenas se ha sentado en su silla y ha pensado la mayor parte del tiempo desde la pantalla de su sala de descanso.

El lance tenía otro color totalmente distinto desde su comienzo. Cuando Ding podía decidirse entre emplear la Apertura Catalana o alguna otra variante del Gambito de Dama, líneas que ya ha puesto en práctica en otras ocasiones, sorprendió en la cuarta jugada con una novedad que nunca había sido puesta en práctica en la élite. Su segundo, Richard Rapport, fue el creador de la innovación.

Ding acaba de jugar 4. h3, su novedad para la partida. Otras jugadas, como 4. Cc3, 4. g3 o 4. e3 han sido mucho más empleadas.
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Ding acaba de jugar 4. h3, su novedad para la partida. Otras jugadas, como 4. Cc3, 4. g3 o 4. e3 han sido mucho más empleadas.

No sucedía nada concreto a pesar de la idea del jugador oriental. La posición se transformó en una especie de Gambito de Dama aceptado en los que sus superiores conceptos estratégicos podían salir a relucir. Todo saltó por los aires en la jugada 12, curiosamente la primera en la que pensó por sí mismo. Una decisión errónea en la práctica que le concedió toda la iniciativa a Nepomniachtchi.

Territorio Nepomniachtchi

El cambio de panorama fue alentador para un Nepo que se dormía tan solo unas jugadas antes. Literalmente. El ajedrecista ruso, de repente, había pasado de tener que sufrir la tortura de una partida lenta en la que era difícil pensar que pudiera conseguir algo a gozar de una actividad inmensa para sus piezas.

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Captura de pantalla FIDE

Como un resorte, las fuerzas de Nepomniachtchi fueron colocándose en los lugares que más le favorecían. Los treinta minutos de desventaja que tenía pasaron a ser treinta y cinco de ventaja. La presión del tiempo, además de la complejidad de la defensa, terminaron por asfixiar a un Ding pasivo en su ajedrez que trataba de cambiar sus hábitos con el paso del tiempo.

El contendiente ruso fue clavando buenas jugadas una detrás de otra. Entre ellas una magnífica entrega de calidad (torre por alfil) que dotó de ventaja decisiva a un Nepo que no tenía entre sus planes dejar pasar la oportunidad de ganar. Tras 29 jugadas, cuando no tenía forma de evitar que una de sus torres fuera capturada, Liren se rindió. “La partida de hoy fue un desastre”, asumía más tarde en rueda de prensa.

Posición tras 29...e5. No hay forma de que el blanco evite que el peón corone sin que la torre de d4 sea capturada.
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Posición tras 29...e5. No hay forma de que el blanco evite que el peón corone sin que la torre de d4 sea capturada.

‘Viviendo’ en la sala anexa

Los nervios están siendo los protagonistas de las dos primeras jornadas del evento. La larga duración de las contiendas obliga a que los participantes tengan una sala anexa particular en la que pueden consumir comida y bebida además de descargar la tensión del tablero. Si bien es habitual acudir ocasionalmente a estos espacios, el uso que Nepo y Ding han hecho de ella es excesivo.

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Captura de pantalla FIDE

Al terminar la primera ronda, Ding confesó que había tenido que lidiar con problemas de ansiedad hasta el punto de tener que cambiar de hotel. Se intuía que evadir esa presión podía ser el motivo por el que buscaba salir de la sala de juego, pero él mismo confirmó cuál era la realidad que se escondía detrás de su comportamiento.

“Pensar en la sala de descanso me recordaba a cuando jugaba online. Es totalmente diferente a pensar en el tablero. Solo vine al tablero cuando tenía apuros de tiempo, pero ya era demasiado tarde. No sé si es más cómodo”, respondió en rueda de prensa cuando fue cuestionado por Leontxo García, de El País.

El panorama del enfrentamiento cambia por completo. Nepomniachtchi lidera y Ding está obligado a demostrar algo más. El cómo sea capaz de gestionar la desventaja tras la jornada de descanso determinará si hay Mundial o si puede haber un desenlace por la vía rápida.