“Luchamos para estar en el podio, todo el mundo tiene ese sueño”

Ha pasado Adrian Lock de sufrir los Juegos Olímpicos desde una habitación de hotel en Tokio, por la tele a causa de su positivo en COVID-19, a vivirlo a 20 minutos de casa, entre familiares y amigos. Como para no estar feliz. El entrenador de la Selección española de hockey femenino, las Red Sticks, no se corta a las puertas de la Copa del Mundo que este viernes arranca en Terrassa: “Queremos convertirnos en uno de los mejores equipos que ha tenido España, y afrontamos el torneo para llegar a los últimos días. Luchamos cada día para estar en el podio, todo el mundo tiene este sueño”.

Es capaz el seleccionador, que lleva en el cargo desde 2013 y renovó recientemente hasta 2024, de transformar la presión de ser anfitrionas en una tremenda motivación. “Jugar en casa me parece espectacular, es una ilusión enorme”, afirmó este miércoles, en conferencia de prensa desde el Olímpic de Terrassa, el escenario de este Mundial como lo fue de aquellos mágicos Juegos de Barcelona. “La sensación que tengo es que jugar en casa es lo mejor que puede haber, nos da un plus, con todo el mundo cerca. Tengo una ilusión como ningún torneo en los que he participado, y llevo unos cuantos, es el torneo que más ilusión me hace”, remachó.

Uno de los secretos que maneja Lock son los días de descanso que dio a sus jugadoras, aprovechando precisamente esa cercanía con sus hogares, después de meses de preparación. “Es importante tener una desconexión antes del torneo para empezar frescos. Ayer (por el martes) recuperamos sensaciones, y desde hace semanas hablamos de cómo será el primer partido. Hay jugadoras que debutarán en un torneo, otras llevan muchos”, desgranó el líder de las Red Sticks, centrado ya en el debut del viernes a las 21:30: “El partido contra Canadá ahora mismo lo es todo”.

Reconoció Lock que “tampoco vamos a llegar al principio del torneo con todo perfecto, pero es normal que haya una evolución, aprender y crecer dentro del campeonato. Estoy muy contento con el nivel del equipo, es muy alto, se nota la confianza de los jugadoras, de lo que son capaces de hacer, y eso me da muy buenas sensaciones”, aseguró.

Y en casa jugará la capitana, Gigi Oliva, quien también atendió a la prensa y que fue preguntada por su entrevista a AS, en la que afirmaba que se retirará de la Selección tras este Mundial, extremo que ratificó, a pesar de que no lo ha comunicado oficialmente a sus compañeras ni al staff. Pero antes, en “una ciudad que ama el hockey”, indicó: “Estamos muy motivadas, sentimos el apoyo de la familia y los amigos, y somos felices de jugar en casa”. “Tenemos muchas ganas de enseñar nuestra mejor versión, de demostrar lo que somos capaces de hacer. Veo un potencial brutal”, zanjó.