Kobrich rompe paradigmas: la mujer récord del cloro
“Es pasión, trabajo, dedicación y resiliencia”, comentó para AS tras meterse en la final del 1.500 libre en su décimo Mundial de Natación.
Kristel Kobrich (Chile, 1985) pasea por la zona mixta con la toalla al cuello, tranquila, con el poso de los 36 años (en agosto serán 37), cinco Juegos Olímpicos y diez Mundiales, récord junto al waterpolista español Felipe Perrone. Acaba de quedar quinta en su serie de los 1.500 con un tiempo de 16:13.52. En el momento de la conversación se disputa la última carrera, con Katie Ledecky a la cabeza, pero la chilena no está demasiada preocupada.
Pese al esfuerzo, mantiene un discurso sereno y emocionante sin poner el ojo en el televisor que está enfrente. “¿Mi secreto? Es trabajo, pasión, dedicación, responsabilidad, orgullo, honor, resiliencia. No es solo tirarse al agua. Hay dos trabajos, uno del cuello para arriba y otro del cuello para abajo. Cada uno tiene una pasión distinta, la mía la natación: sigue siendo algo que me gusta, soy agradecida y quiero representar a mi país”, suelta de una tacada.
La natación chilena no tiene tradición, de hecho Kobrich se entrena desde hace 19 años, cuando empezó su aventura internacional, en Córdoba (Argentina). “He roto paradigmas, he superado obstáculos. A veces los recursos o las infraestructuras no lo son todo. Chile no ve más allá de la cordillera, y salir me ha ayudado”, cuenta después de una prueba que ha contado con la exhibición de nuevo de Katie Ledecky (15:47.02) y que no ha podido deparar las mejores actuaciones de las jóvenes españolas: Ángela Martínez (16:38.39) y Paula Otero (16:57.76).
En su palmarés, Kobrich no posee medallas internacionales más allá de los Juegos Panamericanos, pero la natación le ha ofrecido competir con las mejores y vivir finales apasionantes, como la que le espera este lunes por la tarde en Budapest. No será la primera, pues ha estado en otras seis, con la cuarta plaza en Roma 2009 y Shanghai 2011 como mejores resultados. Años en los que compitió con las mejores españolas del milenio.
De Villaecija y Belmonte a los Panamericanos
“Erika Villaecija fue una persona espectacular dentro y fuera del agua. También Mireia. A ambas les tengo mucho respeto, nos dábamos ánimo y teníamos mucha cordialidad. Somos deportistas y personas. Phelps y Ledecky son extraordinarios, pero hay excelentes deportistas también que no ganan tanto”, valoró una nadadora que reconoce que en su país “somos pocos los que nos mantenemos en el alto rendimiento. Estoy comprometida y quiero responder”.
El rendimiento de Kobrich en los 1.500 y en aguas abiertas romoe moldes como ella comenta, refleja que cada vez hay nadadoras de más edad en las finales que le ganan la partida a la erosión del tiempo a partir de los 30 años. Ella se sigue poniendo nuevos retos. El más atractivo, los Panamericanos de 2023 que organizará su país. “Es algo fuerte. Eso nos ha ayudado a crecer como país, en infraestructuras y en el deporte”, argumentó. Minutos después, aparecen los resultados oficiales. Y Kobrich se mete en su séptima final en sus diez Mundiales. La mujer récord del cloro.