Jonfer, ante el reto del Europeo
El púgil vasco se enfrenta al italiano Casamonica por el cinturón del superligero en La Casilla. Saltan chispas en el pesaje.
Torre Iberdrola, desde las alturas en el centro de Bilbao, ha albergado la ceremonia del pesaje correspondiente a la velada donde se va a dilucidar el Campeonato de Europa de boxeo del peso superligero entre el bilbaíno Jon Fernández y el italiano Armando Casamonica.
El púgil transalpino acudía a la cita con un buen ramillete de tifosi que, desde que se pronunció su nombre, no pararon de la animarle. Lo que iba a ser una ceremonia para la prensa se convirtió en un hervidero. Subía Armando y marcaba 63,450 kilos en la báscula de la Federación Bizkaina y seguidamente Jonfer, el ídolo local, también jaleado, daba 63,400 kg.
Un intenso cara a cara de más de un minuto dio por finalizada la ceremonia con sus respectivas declaraciones. Jonfer y Casamonica no se quitaban la mirada, la tenían clavada, ni con los intentos de los promotores ni con los intentos del speaker y el presidente de la federación, hasta que, con más insistencia, Oscar Zardain, de PCI Promotions, se interpuso entre ellos y el italiano cedió. Jonfer, satisfecho, enseñó músculo a su afición, que seguía gritándole.
El irlandés Pierce O’Leary ha dejado vacante el trono. Casamonica, dos veces campeón de Italia en la categoría, firma 15 victorias y una sola derrota. “Es un boxeador fuerte, que trabaja bastante, va hacia delante, tiene ritmo. Como es bajito, busca dentro, intentando entrar en la guardia del rival”, describió el vizcaíno. Jonfer ha vivido con incertidumbre el último año, en el que se han suspendido tres peleas. Pero está en un gran momento. encadena cuatro victorias, con triunfos especialmente destacados ante los panameños Corrales y Núñez. Quiere desarrollar su boxeo: “La clave es sacar mi mejor versión e ir adaptándome encima de ring a lo que vayamos viendo. No se puede fallar porque peleo en casa”. En caso de victoria, puede situarse en buena posición de cara al sueño mundial.
Antes de ellos, los contendientes al Campeonato de España, el local Jokin García y el manchego Antonio Collado marcaban el mismo peso; 61,230 kg. Ante las preguntas, después de un cara a cara donde los boxeadores, sobre todo el visitante le decía cosas a un Jokin muy sonriente, los dos coincidían en un combate cerrado que podía irse a los puntos por el estilo de ambos.
“Me he preparado para 10 asaltos, conozco a mi rival y es duro, pero también puede llegar un ko y bienvenido será” decía García. Amatrain y Ledesma, que pelearán por un campeonato interino de la WBA, marcaban los dos 63,450 kg y también prometían espectáculo.
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Se le llenaba la boca al navarro al pensar en el combate y decir que “Va a ser una puta guerra”. Jon Míguez, que regresa tras más de un año parado por lesión daba 68 kilos por 67,600 de Guido, su rival, y Andrés Abrego y el suyo marcaban 63,9 kg. Todo listo para que mañana, viernes 22, en el pabellón de La Casilla, a partir de las 18:30 de la tarde, comience el espectáculo organizado por Var Boxing, pci pormotions y gold boxing.
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