NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

GOLF | THE MEMORIAL

Jon Rahm ríe por no llorar en Muirfield

El vasco acaba lejos del número uno en un fin de semana terrenal. El noruego Hovland se lleva en un playoff el triunfo más importante de su carrera.

Jon Rahm ríe por no llorar en Muirfield
MICHAEL REAVESAFP

Fue un día más propenso a la lágrima que a la carcajada, pero Jon Rahm decidió tomarse con filosofía la última ronda de The Memorial, uno de los eventos designados del calendario, que se adjudicó en 2020. No le ha sonreído este año Muirfield Village, diseño de Jack Nicklaus en Dublin, periferia de Columbus (Ohio, EE UU), en el que tenía la oportunidad de encaramarse de nuevo a la primera plaza del ranking mundial. Condición sine qua non era, al menos, un segundo puesto en solitario que le quedó lejos, 16º empatado con el campo tras los cuatro envites de rigor, +2 este domingo en el último.

Rió en varias ocasiones el vizcaíno. De felicidad en el noveno, donde la embocó desde la calle para eagle; de pura desesperación en varias ocasiones, como en la salida de bunker que le volvió a los pies en el 15, o la corbata que le cayó en el 13. Fue otro día completamente descalibrado desde el tee, en el que cogió cuatro calles de 14, y en los greenes, algo más de un golpe perdido con el putter. Como el sábado, empezó con bogey e hiló hasta tres seguidos, fallando en el camino dos putts de menos de metro y medio. Acabó con seis en total, por dos birdies. Lo único algo más consistente esta semana fue su approach. Una lástima porque la victoria no estuvo cara en términos numéricos.

De hecho Scottie Scheffler, el hombre con el que se jugaba el número uno, y con el que compartió partido en la última vuelta, remontó el fin de semana tras entregar dos tarjetas sobre par en las dos primeras jornadas y acabó con un -5 para -6 que era mucho más de lo que necesitaba para retener la corona, pues le valía con estar en el top-16 siempre que Rahmbo no ganara. Y eso que, como este último, penó con el putter desde el jueves. En total se dejó más de ocho golpes en los 72 hoyos, un registro con el que nadie desde que hay estadísticas avanzadas ha conseguido entrar en el top-20 de un torneo. Él acabó líder provisional en casa club. Un golfista total.

Hovland se estrena en las ligas mayores

El último torneo del León de Barrika antes del US Open, que acogerá Los Ángeles en dos semanas, fue escenario de un playoff por el triunfo entre el estadounidense Denny McCarthy y el noruego Viktor Hovland, que descabalgaron al triunvirato que acabó en cabeza el sábado, formado por un McIlroy (+3 para -3) que sigue inédito desde octubre, y que últimamente exhibe una preocupante falta del colmillo cuando llega al domingo con opciones para un jugador con 23 victorias en el tour, el coreano Si Woo Kim (+1 para -5) y el estadounidense David Lipsky (+5 para -1).

Se la jugaron, tras terminar ambos con -7, el resultado más pobre respecto al par desde el triunfo de Hale Irwin en 1995, Denny McCarthy, uno de los mejores pateadores del circuito y un jornalero que a mitad de año lleva ya 23 torneos jugados, que ya se arrimó a la gloria en tres ocasiones en lo que va de temporada, especialmente en Pebble Beach, y el noruego Viktor Hovland, tres veces campeón ya pero en citas de mucho menor calibre. El primer asalto se jugó sobre el 18 y sentenció a favor de Hovland, que le sacó el par mientras a McCarthy le caía el bogey como castigo por fallar la calle. Otra buena noticia para el golf europeo en lo que está siendo un cierto rearme de cara a la Ryder del próximo septiembre.