El miedo escénico del debut
Paula Otero, Carles Coll y Alberto Lozano se estrenan en un Mundial “impactados” por la atmósfera, con buen “feeling”, pero eliminados en la preliminar.
“Estaba un poco fuera de lugar”, dijo Alberto Lozano nada más salir de la imponente piscina del Duna Arena en el que fue el debut de la Selección española en este Mundial de Natación de Budapest. “La primera impresión impacta”, reiteró Paula Otero, la segunda española en tirarse al agua. Más sereno estuvo Carles Coll, que ya había pasado por estas sensaciones en el Europeo de 2021 en esta misma competición, en el que logró ser finalista. El miedo escénico del estreno condicionó el debut del corto equipo español que no ha logrado clasificar a nadadores para la jornada de semifinales y finales de la tarde.
Lozano y Coll llegan a Budapest principalmente para formar parte el último día de competición del relevo 4x100 estilos. Pero, pese a no haber hecho las mínimas requeridas por la dirección técnica, ambos también se ruedan en las pruebas individuales. Por la calle 9 de la serie de los favoritos le tocó lidiar a Lozano, del CE Mediterrani y nadador de Arena, en los 50 mariposa, aquella prueba que encumbró a Rafa Muñoz (poseedor del récord mundial durante una década). El madrileño finalizó noveno de su serie con 23.72, a dos décimas del corte. “Me gusta más nadar en las calles centrales, pero me tocó en la lateral y en una prueba muy difícil”, afirmó.
Coll, por su parte, soñó con el pase a las semifinales de los 100 braza después del primer 50. Por la calle 2, muy seguro y veloz, marcó el tercer mejor tiempo (28.66), pero luego le llegaron los problemas. “En el viraje perdí tempo. Hice una mala brazada y ya no fui bien y lo pagué, pero toca recuperarse. Esto acaba de empezar”. Hizo la segunda peor vuelta de la serie y acabó con 1:02.52. El corte estaba en 1:00.70. El nadador se ha entrenado este año con Sergi López en Virginia Tech (Estados Unidos): “He crecido bastante mentalmente. En las NCAA lo noté, pude competir a buen nivel con gente buena, es lo que me ha hecho mejorar más. Soy joven y me queda mucho”, balbuceó por el esfuerzo.
Entre medio de ambos le tocó debutar en los 400 libre a Otero, nadadora de Arena, que sigue la saga de María Vilas en el Centro de Tecnificación de Galicia que dirige Luisa Domínguez. A sus 18 años, esta prueba le valió de calentamiento teniendo en cuenta de que aspira a mejor posiciones en el 800 y el 1.500 libre. “No vengo con mucha presión, vengo a observar. Quiero hacerlo bien. Ahora afronto el 1.500 libre con alegría”, comentó una ilusionada nadadora que registró 4:18.90, integrante del nuevo equipo de jóvenes valores que se está sumando al grupo para París 2024.
Este domingo repetirá Otero en los 1.500 libre y además también competirán Hugo González (100 espalda), Jessica Vall (100 braza), Sergio de Celis (200 libre) y Ángela Martínez (1.500 libre). La natación española espera en el segundo día colar a nadadores en semifinales y empezar a soñar con alguna final.