El fin de una era en la NFL... y el inicio de otra
Ante el ocaso de quarterbacks como Brady o Rodgers, una hornada de jóvenes talentos empieza a dominar la NFL. Hoy arranca la ronda Divisional.
Los playoffs de la NFL prosiguen su marcha con la Super Bowl como destino. Tras una ronda de Wild Card repleta de drama y emoción, este fin de semana es turno de una ronda Divisional (cuartos de final) que da su pistoletazo de salida esta noche. Ya solo quedan ocho equipos con vida y, además, entran en juego los primeros cabezas de serie (Philadelphia Eagles y Kansas City Chiefs), que descansaron la pasada semana. Los de Kansas abrirán esta nueva fase recibiendo hoy (22:30 de España) a los Jacksonville Jaguars, y el Philadelphia Eagles-New York Giants (02:15) completará el menú del sábado. El domingo se disputarán los otros dos encuentros: Buffalo Bills-Cincinnati Bengals (21:00) y San Francisco 49ers-Dallas Cowboys (00:30).
Esta postemporada está sirviendo para corroborar algo que se venía percibiendo: la NFL está viviendo un cambio de guardia, con un buen puñado de jóvenes quarterbacks derribando todo tipo de puertas hacia el dominio de una liga que durante muchos años han reinado hombres como Tom Brady o Aaron Rodgers. De los ocho quarterbacks titulares que quedan en estos playoffs, ninguno alcanza los 30 años y la media de todos se sitúa en algo más de 25 años. Los más jóvenes, Brock Purdy y Trevor Lawrence, cumplieron recientemente 23, mientras que los más ‘veteranos’ son Patrick Mahomes y Dak Prescott, con 27 y 29 años, respectivamente. Esta media de edad entre los quarterbacks de una ronda Divisional es la más baja desde 1970, año en el que se comenzó a disputar esta fase en playoffs.
De los ocho supervivientes, tan solo Mahomes y Burrow tienen experiencia en una Super Bowl. La mitad de ellos, de hecho, debutará este fin de semana en una ronda Divisional (Purdy, Lawrence, Jones y Hurts). Ya no hay rastro de la vieja guardia, de esos jugadores que han dominado la liga durante tantos y tantos años. Tom Brady y sus Tampa Bay Buccaneers cayeron eliminados el pasado lunes en Wild Card ante los Cowboys, y el ganador de siete anillos vuelve a bailar ahora con una posible retirada a los 45 anillos. Tampoco están los Green Bay Packers de Aaron Rodgers, que se quedaron fuera de playoffs en la última semana de temporada regular, dando paso a que el cuatro veces MVP amenace de nuevo con abandonar la franquicia a los 39 años. De hecho, esta es la primera vez en los últimos 14 años en la que Brady y Rodgers no suman una sola victoria entre ambos en playoffs. Por el camino, además, se han quedado leyendas como Ben Roethlisberger o Drew Brees, retirados en los últimos años y que han dado paso a savia joven que ya empieza a dominar la NFL.
Kansas City Chiefs vs Jacksonville Jaguars (22:30, hoy)
Llegó la hora de los reyes de la AFC. La última vez que los Chiefs no llegaron al AFC Championship, la final de conferencia, fue en 2017, temporada en la que Patrick Mahomes era rookie y suplente. Desde que el futuro MVP de esta temporada cogiese las riendas del equipo en 2018, los de Kansas City nunca han fallado a su cita con el partido que da acceso a la Super Bowl. Y este año no quieren romper la racha. Llegan a esta ronda Divisional sin conocer la derrota desde el pasado 4 diciembre y habiendo descansado una semana tras haber finalizado la temporada regular en el primer puesto de la Conferencia Americana. Los recursos de los de Andy Reid en ataque son infinitos: Mahomes tiene como mejor aliado a Travis Kelce, pero otros nombres como Jerrick McKinnon, Mecole Hardman o JuJu Smith-Schuster son capaces de dinamitar cualquier partido. Perdieron en pretemporada a Tyreek Hill, pero los Chiefs son tan superiores que apenas han notado su ausencia. Cuentan, además, con una de las aficiones más ruidosas de la liga, la cual en ocasiones pone en serios problemas a los rivales para que se escuchen sobre el campo.
Sin el cartel de favorito, los Jaguars regresan a la fase Divisional por primera vez desde 2017. Tras varios años por el desierto, Jacksonville ha encontrado en Trevor Lawrence a su quarterback franquicia. Y eso que el arranque del partido de la pasada semana en Wild Card parecía indicar todo lo contrario. En la primera mitad del duelo ante Los Angeles Chargers, Lawrence lanzó cuatro intercepciones y su equipo se colocó 0-27 por debajo en el marcador. La reacción llegó, y el número uno del Draft de 2021 lideró la reacción de los Jaguars, que lograron la tercera mayor remontada en la historia de los playoffs. Ahora viajan a Arrowhead sin ningún tipo de complejo, y es que Doug Pederson (campeón de una Super Bowl entrenando a Philadelphia) ha formado un equipo que destaca por su desparpajo y valentía a la hora de la verdad, con una defensa capaz de dar muy poco tiempo al quarterback rival. Jugadores de ataque como Evan Engram o Christian Kirk recibieron mucho dinero en verano y están respondiendo. No tienen nada que perder ante los Chiefs, e irán a por todo en una ocasión de oro para ellos.
Philadelphia Eagles vs New York Giants (02:15, hoy a mañana)
Si en el primer turno del sábado debutarán los líderes de la AFC, a continuación lo harán los de la NFC. La semana de descanso le ha venido como anillo al dedo a unos Philadelphia Eagles que llegaron algo justos al final de temporada regular, especialmente Jalen Hurts, quien tuvo que parar unas semanas por lesión. En su tercera campaña en la NFL, el quarterback de 24 se ha destapado como un problema prácticamente imparable para las defensas rivales gracias a su doble amenaza: es capaz de pasar con maestría y de correr como si fuese un running back. Tiene, además, tres hombres de plena confianza y que llevan toda la temporada garantizando resultados: los receptores DeVonta Smith y A.J. Brown y el corredor Miles Sanders. Las pocas veces en las que el ataque sufre, la defensa da un paso adelante con una agresividad que asusta. Durante todo el año, los Eagles han combinado momentos de absoluto dominio con algunos de ciertas dudas a pesar de su balance ganador (14-3), y es que su calendario no ha sido especialmente exigente.
En playoffs ya no hay rivales fáciles, y los New York Giants han dejado claro que no lo son. Será la tercera vez en la que Eagles y Giants se medirán en esta temporada, ya que son rivales divisionales. Los dos primeros duelos se saldaron con triunfo de Philadelphia, el último en la jornada final hace apenas dos semanas, pero el momento de los de la Gran Manzana ha cambiado radicalmente en este corto periodo de tiempo. La victoria del pasado domingo en Wild Card frente a los Minnesota Vikings fue el chute de confianza que los Giants necesitaban. Las bases estaban, pero el primer partido ganado en playoffs desde 2012 ha disparado la motivación de un equipo al que el entrenador Brian Daboll le ha cambiado la cara. El principal reforzado de este triunfo en la carretera fue Daniel Jones, el quarterback de 25 años que, tras haber sido discutido hasta por su propia franquicia durante sus cuatro temporadas en la NFL, dio un verdadero golpe sobre la mesa en su estreno en playoffs. Jones, además, tiene la suerte de no cargar con todo el peso del ataque, y es que el corredor Saquon Barkley está completando una temporada en la que vuelve a estar entre los mejores de su posición. Ganar tres veces a un equipo en un mismo año es muy difícil, y los Giants viajan al Lincoln Financial Field siendo muy peligrosos y aspirando a reventar la burbuja de los Eagles.
Buffalo Bills vs Cincinnati Bengals (21:00, domingo)
Por cartel, es probablemente el mejor partido de la ronda Divisional. Dos equipos de la AFC que encaraban los playoffs con la Super Bowl como único objetivo y con dos de los mejores quarterbacks de la NFL, frente a frente. Este era el partido que tanto prometía hace tres semanas, pero que el paro cardíaco de Damar Hamlin obligó a suspender. Lo poco que se pudo jugar ya hizo ver que el duelo prometía, y esta vez no será menos. Ambos llegan con el susto en el cuerpo tras la ronda de Wild Card y necesitan reencontrarse con su mejor juego si quieren volver a aspirar al anillo. Los Bills, en su tercer asalto consecutivo para alcanzar una Super Bowl que se les resiste desde 1993 (cuando perdieron cuatro seguidas), sufrieron de lo lindo ante los Miami Dolphins, séptimos cabezas de serie que acariciaron la campanada. El quarterback Josh Allen cometió varios impropios de un jugador de su nivel, y el foco está puesto en él esta semana. Tiene la tarea de cometer menos pérdidas de balón, algo que ha venido penalizando mucho a los de Buffalo en las últimas semanas. A pesar de este bajón, los Bills tienen todo lo necesario en ataque para darle la vuelta a la situación, y es que Stefon Diggs y Dawson Knox llegan al Divisonal en un gran momento. La defensa, eso sí, necesitará mejorar ante un rival que le va a exigir mucho más que los Dolphins.
Porque los Bengals, al igual que Buffalo, también es un equipo que destaca por un ataque explosivo, capaz de sacar petróleo de la nada. Llegan a esta ronda Divisional con nueve triunfos consecutivos (la última derrota fue el 6 de noviembre) y como uno de los equipos más en forma del momento. Esta sensación de euforia se diluyó de algún modo la semana pasada, cuando tuvieron que sudar tinta para superar a unos Baltimore Ravens que llegaban a playoffs sin su estrella, Lamar Jackson. No fue el mejor partido de los de Ohio, pero sirvió también para demostrar que saben manejarse en el barro tan característico de la postemporada. Y el frío que se espera en Buffalo a buen seguro hará de este un encuentro durísimo. Los finalistas del año pasado mantienen el bloque que les llevó a la Super Bowl, pero un año más maduro. Joe Burrow, con 26 años, es uno de los mejores quarterbacks de la liga, aunque necesita una mejor protección por parte de una línea ofensiva que ha sufrido tres bajas muy sensibles. Si tiene el tiempo necesario para armar el brazo, su conexión con Ja’Marr Chase puede ser letal. La defensa es la gran olvidada de los Bengals, y la semana pasada recordó con una recuperación para touchdown que supuso la victoria que también es capaz de dar un paso adelante cuando sea necesario.
San Francisco 49ers vs Dallas Cowboys (00:30, mañana al lunes)
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Brock Purdy es el hombre de moda en la NFL, y los 49ers son el equipo del momento con 11 triunfos consecutivos. La historia del quarterback de 23 años, elegido en el último puesto del pasado Draft (selección 262, séptima ronda), continúa cautivando al mundo del deporte en algo pocas veces visto. Ya deslumbró en temporada regular con cinco victorias en sus cinco primeras titularidades tras convertirse en el reemplazo de emergencia ante las lesiones de Trey Lance y Jimmy Garoppolo. Pero su debut en playoffs lo colocó en una nueva dimensión. Como si de un veterano se tratase, este jugador que nadie conocía hace dos meses se hizo amo y señor del duelo de Wild Card que su equipo disputó frente a los Seattle Seahawks. Purdy fue clave para que los 49ers arrollaran a sus rivales y dejó varios registros históricos, como el de convertirse en el primer quarterback rookie que registra un total de cuatro touchdown en su debut en playoffs. Tiene una bravura que asombra, y visto está que no se deja intimidar cuando es cabeza de cartel. Cierto es que su equipo se lo pone más fácil, y es que estar rodeado en ataque de estrellas como Christian McCaffrey, Deebo Samuel, George Kittle o Brandon Aiyuk, y de una defensa que es, estadística en mano y gracias a hombres como Nick Bosa o Fred Warner, la mejor de la liga, permite a Purdy sentir menos presión sobre sus hombres.
Los Cowboys, por su parte, visitan Santa Clara en un partido con sabor a historia (cada franquicia tiene cinco anillos) y con sed de venganza. El año pasado, fueron apeados de playoffs en casa por los 49ers en Wild Card. Y si algún jugador en particular quiere resarcirse, ese es Dak Prescott, quien cometió en aquel partido un error infantil que dejó a su equipo sin opciones de darle la vuelta. El primer aviso lo dio el quarterback de 29 años el pasado lunes con un estratosférico encuentro para eliminar a los Tampa Bay Buccaneers. El aviso, realmente, lo mandaron todos los Dallas Cowboys, que completaron un partido digno de un aspirante a playoffs. Desde su triunfo de hace un mes ante los Eagles, las sensaciones de los tejanos no hacen más que ir a mejor, y ahora quieren aprovechar el momento para desbancar a unos imparables 49ers. La conexión de Prescott con CeeDee Lamb puede crearle problemas a la secundaria de San Francisco, y jugadores como Troy Pollard o Dalton Schultz llegan en un dulce momento. Ante los Buccaneers, la defensa de Dallas volvió a ser una apisonadora con Micah Parsons como gran referente, y la gran incógnita la presenta Brett Maher. El kicker de los Cowboys registró en Wild Card un histórico 1/5 en conversiones de un punto (récord de más errores desde, al menos, 1950), aunque los de Dallas han apostado por trabajar con él y mantenerlo en la plantilla de cara a este fin de semana. Eso sí, han firmado al pateador Tristan Vizcaino por si Maher no convence en la previa. Todo listo para una ronda Divisional que, marcada por la igualdad y la juventud de sus protagonistas, dejará tan solo cuatro equipos con vida en la carrera por la Super Bowl.