El acto de honradez de Bradberry ante la polémica de la Super Bowl

En la victoria de los Kansas City Chiefs frente a los Philadelphia Eagles en la Super Bowl, una polémica jugada resultó determinante para el devenir del encuentro. En la última posesión de ataque de los de Mahomes, los árbitros señalaron una falta que acabó por sentenciar a los de Philadelphia. Y, a pesar de que las redes sociales criticasen con dureza la decisión de los colegiados, esta polémica ha sido acallada por uno de sus protagonistas.

A falta de menos de dos minutos para el final del partido, los Chiefs se encontraban a tan solo 15 yardas de la zona de anotación. La situación era de tercer down y ocho yardas por recorrer, por lo que los de Kansas City estaban obligados a convertir una jugada para no devolver el balón a los Eagles con tiempo suficiente para darle la vuelta. Por ello, Mahomes lanzó un pase bombeado hacia JuJu Smith-Schuster, quien no pudo atraparlo. De inmediato, los árbitros lanzaron el pañuelo amarillo al aire, indicando un holding defensivo del cornerback James Bradberry sobre el receptor que haría que los Chiefs gozasen de un nuevo set de downs con el que poder agotar el reloj.

En la repetición se podía apreciar que había un ligero agarrón de Bradberry sobre Smith-Schuster, quizás insuficiente como para ser señalado como falta en un momento tan decisivo. Sin embargo, fue el propio defensor de los Eagles quien, tras la finalización de la final, reconoció que sí había sido merecedor de sanción: “Era holding. Tiro de su camiseta y lo pitaron. Esperaba que lo dejasen pasar”, reconoció Bradberry en un gesto de honradez, sin querer echar leña al fuego. La polémica quedó silenciada de golpe.