Dani Román: “Saltar del Burj Khalifa fue el mejor evento de mi vida”
El saltador español, nacido en Úbeda, rememora con AS cómo fue su vuelo desde el edificio más alto del mundo.
Dani Román es un deportista español de deportes extremos con más de 15 años de experiencia en este campo. En Úbeda (Jaén) han nacido gente como Joaquín Sabina, que desarrolló su talento a través de la música, y Román hizo lo propio a través del salto. De todos lo que ha realizado, se queda con el que realizó desde el Burj Khalifa, en Dubái, una experiencia que ha compartido con AS.
¿Qué es el salto BASE?
La diferencia entre el paracaidismo y el salto BASE es que en el primero saltamos desde objetos fijos. BASE son las siglas de Building (edificio), Antenna (antena), Span (vano) (como puentes) y Earth (tierra) (como acantilados), los cuatro tipos de objetos desde los que saltamos.
¿De dónde viene su pasión por los saltos?
Siempre me ha obsesionado todo lo que vuela, los aviones, los parapentes, el paracaidismo. De niño soñaba con ser paracaidista. No sé exactamente de dónde vino, pero creo que es algo que sienten muchos niños, el sueño de volar. Nunca lo abandoné y decidí hacerlo realidad.
¿Cómo es la preparación antes del salto?
Todo salto comienza con la preparación: conocer los números, la distancia hasta el aterrizaje, la altitud, las condiciones meteorológicas, así como entender el lugar, el equipo y el propio nivel de habilidad. Todo tiene que estar alineado para estar listo para el salto. La base del salto BASE es el paracaidismo, cuanto más entrenes, más preparado estarás cuando realmente cuente.
¿Y antes de un salto desde un edificio?
Como en cualquier otro salto BASE, compruebas los números, la altitud, el tiempo. Un plan claro en tu cabeza y la preparación para el salto son la clave
Desde el edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa... ¿Estaba nervioso?
Sí, por supuesto. Siempre estoy nervioso antes de un salto y creo que eso es bueno. Te mantiene alerta y concentrado. Te hace pensar en lo que podría salir mal y cómo lo manejarías. Necesitas un plan A, B y C para estar preparado para cualquier situación.
¿Hay que tenerlo todo bajo control: el tiempo, el aire...?
Absolutamente. Antes de cada salto, tienes que tener claro al 100% tu plan. El tiempo de caída libre, cuándo y cómo abrirás el paracaídas y la trayectoria de vuelo de la campana.
¿Cómo fue su experiencia?
El evento Exit 139 en el Burj Khalifa fue el mejor evento de mi vida. Rodeado de buenos amigos y saltando desde el edificio más alto del mundo. ¡Fue épico!
De Úbeda a Dubái, ¿le ha cambiado algo la vida esta ciudad?
Fue una experiencia increíble. En Dubai tuve la gran oportunidad de crecer y aprender en el paracaidismo. Fue una verdadera oportunidad para impulsar mi carrera, conocer a gente increíble, ¡y volar mucho! Disfruté mucho de ese tiempo, fue un capítulo inolvidable.
¿Cuál es el próximo salto?
Bueno... siempre se cuece algo, quiero hacer un par de proyectos en España este año, a ver.
Experiencia en el Burj Khalifa
El Burj Khalifa es el orgullo de las autoridades de Dubai, pero también de la población. Son continuos los comentarios sobre el rascacielos, animándote a subir a él y a visitar la zona que lo rodea. Porque alrededor de él, se puede visitar el Dubai Mall, el centro comercial en extensión más grande del mundo (de hecho para subir al rascacielos debes hacerlo por la planta baja del centro comercial) y también disfrutar de la Fuente de Dubai con su espectáculo de luces.
Hay que mencionar que el Burj Khalifa es el edificio más alto de mundo con 828 metros de altura y que ha sido reconocido por el libro Guinness de los récords. Construido en la conocida zona financiera de la ciudad dubaití, su construcción duró poco más de 5 años y abrió al público en enero de 2010. Además, cuenta con 57 ascensores, incluyendo uno de los más rápidos del mundo, que alcanza una velocidad de 10 metros por segundo.Este ascensor puede llevar a los visitantes hasta el mirador “At the Top” en menos de un minuto, recorriendo más de 500 metros.
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En una ciudad cálida como es Dubai, existen dudas del tiempo que hará allí arriba, concretamente en el piso 124, donde está la plataforma de observación. En pleno mes de noviembre, a las 12 de la mañana, la urbe dubaití soporta casi 30 grados, pero a pesar de la altura, la temperatura, según cuenta el personal del edificio solo baja unos 6 grados.
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