Los zurdos avanzan a zancadas en la élite del pádel
Cinco parejas masculinas y dos femeninas en la Hexagon Cup están configuradas con un jugador izquierdo en el drive.
Juan Martín Díaz, leyenda viva del pádel que está escribiendo las últimas páginas de su biografía deportiva, fue el primer gran jugador zurdo de los tiempos modernos. Con Belasteguín de compañero fue durante trece años la mejor pareja del mundo. Luego Bela se unió a otro zurdo, Pablo Lima (presente en Madrid como comentarista) y mantuvo ese dominio por cuatro años más. Tras esa combinación, en 2023 aparecieron otras dos parejas con esa combinación para dominar la temporada: Coello y Tapia y Paula Josemaría y Ari Sánchez, en hombres y mujeres.
En el Hexagon Cup cinco de las seis parejas masculinas las forman diestro y zurdo (Tello y Di Nenno es la excepción) y dos en la femenina (Paula Josemaría y Claudia Jensen son las zurdas). Para Lucho Capra, zurdo, “esa presencia no tiene mayor importancia”, y aunque en un principio cree que al margen de los que juegan en Madrid “no ha tantos zurdos”, en una reflexión no muy concienzuda se encuentran en que le aparecen bastantes más “Diestro, Gonzalo Rubio, Belluati...”.
Sanyo Gutiérrez piensa que “hay jugadores, como Beleasteguín, que necesitan un zurdo a su lado”, y Bela admite que “Sanyo tiene razón”. “La combinación diestro-zurdo es fundamental en el juego. Y en mi caso, yo soy un jugador sólido en defensa, y con un zurdo compenso el juego”, aseguraba ayer el argentino que este año jugará con Capra.
Agustín Tapía, que actúa con Coello en en Premier Padel, en la Hexagon Cup, también ha elegido a un zurdo para complementar su pareja: “Tuve muchas llamadas de diestros, pero elegí a Jon Sanz, que ni me insinuó que quisiese jugar el torneo”, ironiza ante el navarro.