Conjura Guerrera
España se enfrenta a Montenegro en un partido vital tras la debacle ante Islas Feroe. “Hay que luchar por dos puntos en la ‘main round’, dice el seleccionador.


“Estamos dolidas y evidentemente nos sentimos mal. Ha sido un golpe muy duro, pero hay que levantarse porque no queda otra. Tenemos que seguir compitiendo, corregir errores y hacerlo lo mejor posible en el próximo partido”, afirma Alicia Fernández, capitana de las Guerreras. La inesperada derrota ante Islas Feroe, el primer triunfo en la historia del Mundial para las isleñas, ha hecho mucho daño a la Selección, además de teñir de negro el horizonte en el campeonato planetario. Hoy, el rival (18:00, Teledeporte) es, a priori, muchísimo más duro, Montenegro. Y toda opción de soñar con los cuartos de final pasa casi inexorablemente por un triunfo de las jugadoras de Ambros Martín. “Es un rival duro, agresivo y que juega muy físico. Debemos estar mentalmente fuertes para superar el partido de las Islas Feroe y prepararnos para una batalla bastante dura. Hay que luchar por tener dos puntos en la ‘main round’, significaría mucho para el equipo”, dice el seleccionador español.

En condiciones normales, es decir si Islas Feroe derrota a Paraguay, España pasará con dos puntos si derrota a Montenegro, con uno si empata, y con cero si pierde ante las balcánicas. “Tenemos que ganar a partir de la defensa. En ataque también tenemos que mejorar, sobre todo las situaciones de lanzamiento. Debemos levantarnos porque esto no ha terminado y nos quedan más partidos”, explica Fernández con ganas de revancha. Esa conjura que las integrantes de las Guerreras se han propuesto tras el batacazo ante un país debutante y que veía un éxito casi la participación.
“Si alguien me hubiera dicho hace diez años que estaríamos en el Mundial habría pensado que era una broma, que nunca sucedería”, afirma Bjarta Johansen, la jugadora con más internacionalidades de Islas Feroe... que antes jugó el fútbol como portera y llegó a representar a su país en la clasificación europea para el Mundial de 2015. Y apostilla para resaltar aún más la gesta: “No soy profesional a tiempo completo; de hecho, tenemos muy pocas en nuestra selección nacional. Trabajo 40 horas semanales como investigadora en la agencia ambiental del país y luego entreno cuatro veces por semana con mi club”.

“Perder debe servirnos no como lección, pero sí para entender que con más calma podremos materializar las ocasiones que generamos y, de algún modo, darnos confianza para seguir trabajando en la defensa”, dice Martín. Y sobre la batalla final de hoy ante Montenegro, que ha ganado sus dos partidos y fue bronce en el Europeo de 2022, pide pelea a las suyas: “Tenemos por delante el más difícil todavía, pero toca luchar en un partido intenso y seguramente muy duro”.
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Y las Guerreras aseguran estar preparadas para el reto. “Fue un palo importante, pero el equipo tiene capacidad de sobra para levantarse, recomponerse, coger fuerzas y darlo todo contra Montenegro. Somos un grupo con jugadoras de mucha calidad y confío en que vamos a sacar nuestra mejor versión”, asegura Anne Erauskin. Argumento muy similar al de Danila So: “Lo afrontamos con muchas ganas, como todos los partidos que hemos jugado hasta ahora, pero con una especial rabia, porque lo que vimos ante Islas Feroe fue muy doloroso. Queremos redimirnos y, sobre todo, demostrar la fuerza que llevamos dentro”.
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