ATLETISMO | EUROPEOS INDOOR EN ESTAMBUL
Tentoglou brilla y Guerra acierta el bronce... pero no puede saltarlo
El griego se impone en la longitud con 8,30 mientras el español se queda lejos de esos 8 metros que de saltarlos le habrían permitido subir al último escalón del podio.
Seis saltos hacia la gloria para Jaime Guerra, un cercano y simpático joven con muelles en las piernas nacido hace 23 años en el hospital de Esplugas de Llobregat... “aunque soy de Sant Boi”, especifica. “Si paso de ocho metros (hizo 7,99 en la clasificación y su mejor marca es 8,08) estaré peleando por las medallas. Por eso arriesgaré, iré a muerte”, decía con rotundidad a AS antes de la final de salto de longitud del Europeo en Estambul. En realidad, ‘AerolineasWar’ (su nickname enredes sociales) se refiere a pelear por el bronce ya que el oro parecía casi propiedad del griego Miltiadis Tentoglou y la plata del sueco Thobias Montler.
La experiencia en este tipo de certámenes es importante y se vio en el brinco inicial. Tentoglou voló hasta 8,30 mientras Guerra batió lejísimos de la tabla para un corto 7,65. El heleno miraba al oro; el español, que entrena en Cornellá bajo las órdenes de María Durán y con sus compañeros “de toda la vida”, a relajarse, ajustar y ver el ocho como primer dígito. Segunda ronda. Montler llega a 8,19 para acariciar ya la plata. Guerra concentrado, pensando en su carrera de 18 apoyos... para casi calcar lo sucedido en el intento anterior. Mejora de dos cm: 7,67. Se acerca al gurú Iván Pedroso, responsable de saltos horizontales en este campeonato, que le aconseja. Guerra asiente.... y en el tercero llega a 7,84. Más cerca del objetivo, pero aún no es suficiente. Sigue talonando demasiado lejos del límite rojo.
Guerra quiso ajustar en el quinto... y fue nulo. Sólo quedaba el sexto: 7,78. Sexto puesto y cara de decepción. El bronce se lo llevó el rumano Bitan con 8 metros clavados. Jaime acertó la marca para colgarse una medalla en Estambul, pero falló en la ejecución. En el último brinco, Tentoglou hizo casi capicua en su concurso al llegar a 8,29 y certificar un oro que no tenía discusión. Como la plata de Montler. “Me quedo con la espinita de no haber saltado ocho metros y llevarme medalla. No me han dado las piernas con dos competiciones tan seguidas. Necesito cinco días para recuperarme. Toca seguir entrenando para mejorar estas cosas porque ahora mis músculos no aguantan competir dos días seguidos. Siempre me pasa lo mismo. Hay que quedarse con lo positivo porque creo que voy por el buen camino. Y seguro que María piensa cómo mejorarlo. Estoy contento con acabar sexto en mi primer Europeo, pero hoy no me he visto bien en competición”, decía Guerra en zona mixta.
