PARÍS 2024 | LANZAMIENTO DE PESO
She-Hulk sorprende con su outfit facial para entrar en la final
Raven Saunders, firme defensora de las causas sociales, hizola clasificación con una máscara que le cubría toda la cara. Toimil, eliminada: “Estoy hasta los coj...”.
Simone Biles puso en Tokio 2020 el debate de la salud mental encima de la mesa mundial. Raven Saunders llevaba muchos años incidiendo en ello. Principalmente, porque lo ha sufrido de manera intensa en carne propia. La lanzadora de peso estadounidense de 28 años es un emblema de varios colectivos que se consideran maltratados por la sociedad. Pelea contra todo, frente a sí misma. Tras ganar la plata en Tokio, la natural de Carolina del Sur subió al podio, levantó los brazos y formó una ‘X’ entre sus muñecas durante más de 20 segundos para simbolizar “la intersección en la que todas las personas oprimidas en esta sociedad se encuentran”. Se jugó una importante sanción que le podría haber evitado estar en París 2024. No por saltarse tres controles antidopaje, como le sucedió para tener que estar ausente en los Mundiales de Budapest 2023, sino por quebrar el apartado de la Carta Olímpica en el que dice que “no se permitirá ningún tipo de manifestación ni propaganda política, religiosa o racial”. “Que intenten llevarse esta medalla. Cruzo el océano nadando, y eso que no sé”, decía Saunders.
La Hulk femenina, She-Hulk como le gusta a ella por el personaje de los cómics, emuló a sus compatriotas Tommie Smith y John Carlos que en México 1968 reivindicaban con su puño en alto revestido con un guante negro para incidir en la desigualdad racial y la falta de derechos civiles de los negros, utiliza un outfit muy particular e impactante, al que ha añadido mascarillas ideadas por ella misma tras la pandemia del Covid. Defensora de los adolescentes, el colectivo LGTBI+, las personas no binarias, las mujeres negras, aquellos que han tenido pensamientos suicidas... En la clasificación del lanzamiento de peso, Saunders lanzó la bola hasta 18,62 metiéndose sin problemas para la final de mañana (19:40 horas). Una cita por las medallas, con las doce mejores, que no tendrá a Belén Toimil, 25ª con 16,83.
En esa ronda definitiva habrá que ver el ‘outfit facial’ de Saunders que en la clasificación de Tokio 2020 llevaba una máscara de Joker con una simulación de aparato antigás. Acompañado como en París de reflectantes gafas de sol y cabello teñido de verde y morado. Días después, en la final, sí salió con su máscara verde, el color de Hulk y pidió a sus fans de Instagram que llevaran algo ‘verde’ para ayudarla a inspirar.
LA ESPAÑOLA, MUY AFECTADA.
En zona mixta, Belén explotó contra sí misma tras quedar fuera de la final. ‘En la mejor temporada de tu vida, la más regular, ahora te has quedado fuera. Una pena’, preguntaba el periodista de RTVE. Y Toimil reaccionó así: “Por qué me haces llorar, vaya pregunta, me cago en la p... Joder, es que da rabia. He salido y no estaba llorando. Estoy hasta los coj... de que no me salgan las cosas. He hecho un nulo y he pensado, bueno, quedan dos más. Y el último me encontraba bien. Venga, lo tengo, simplemente tiene que salir... y no salió”.
Y siguió: “Es para pegarme un tiro. Qué voy hacer, no voy a hacer nada, ya está, ya pasó; siempre dije que las calificaciones son una mierda. Hay gente muy buena que se queda fuera. Esto es Los Juegos del hambre. Me da rabia que haya sido así, pero qué voy a hacer. No me tengáis como llorona, pero es emocionante estar aquí, ves los resultados y te da rabia. Nada, me queda ir a los Ángeles, aunque sea en tacataca, a saber dónde estaré”.