ATLETISMO | MUNDIALES EN OREGÓN
Dos diplomas españoles en la marcha
Raquel González (Mataró, 32 años) fue quinta en los 35 kilómetros con Laura García Caro (Lepe, 27) sexta. Oro para la peruana Kimberly García León liderando el mismo podio del 20.
Raquel González y Laura García Caro llegaron al circuito plano de un kilómetro de longitud situado en el bolevar Martin Luther King de Eugene, enfrente del estadio Autzen, la casa del equipo de fútbol americano de la Universidad de Oregón, con ‘ganas de revancha’. En los 20 kilómetros marcha María Pérez fue descalificada y en los 35 las dos bravas marchadoras españolas querían dejar alto el pabellón de la especialidad que más medallas ha dado a España en los Mundiales de atletismo: 17 de 41 (el 41,4%).
La nueva prueba larga de la marcha es casi más parecida a la velocidad del 20 que al sufrimiento del 50 y eso se nota en el desarrollo de las pruebas. Pistoletazo de salida, con una temperatura de 15 grados pero una sensación gélida en el ambiente, y ya nadie contemporiza ni hace planes a largo plazo. Salen fuertes. En la cita femenina de Eugene los 10 kilómetros iniciales se cubrieron en 46:27 (4:39 el kilómetro) y los 20 en 1h31:49 (45:22 del 11 al 20, a 4:32 cada 1.000). Todo siempre liderado en un perfecto ‘Día de la Marmota’ por la formidable marchadora peruana Kimberly García León (28 años), oro en la prueba del primer día de los 20 kilómetros, con la polaca Katarzyna Zdzieblo, medalla de plata, a once segundos. Por detrás, la china Shijie Qieyang, bronce en la cita inicial de Eugene, les seguía a lo lejos (1:16) tratando de mantener una buena ventaja de 1:19 que mantenía sobre un grupo de siete marchadoras en las que estaban perfectamente incrustadas Raquel y Laura.
La marchadora de Mataró (32 años y en su tercer campeonato del mundo) y la de Lepe (27, con cuatro siendo la mujer con más en España) no cedían y se las veía cómodas en el grupo perseguidor. De hecho, según avanzaban los kilómetros, González se escapaba del grupo y se colocaba cuarta en solitario. Misma acción que ejecutaba García Caro, en su caso en el quinto lugar. Raquel iba como un tiro y su ritmo era el más alto de todas las competidoras, recortando tiempo a las tres de delante. Cuatro segundos a la china en el km 26, seis en el 27, otros cuatro en el 28, uno en el 29...
A los cinco finales llegaba Raquel González a 56 segundos y Laura García Caro a 1:18 de Shijie Qieyang, una distancia en principio muy complicada de salvar pero teniendo en cuenta el esfuerzo de esta prueba las espadas y las opciones aún estaban en todo lo alto. Y más viendo el gran desempeño y marchar de las españolas... que pese al enorme esfuerzo e intentarlo no pudieron cazar a la china. Quinto puesto para Raquel (2h:42:27) y sexto de Laura (2:42:45). que fieron adelantadas al final por la griega Ntrismpioti. Dos diplomas más para España, el sexto y el séptimo en los Mundiales de Eugene. Y podio repetido en las dos pruebas de marcha femenina con espectacular doblete de la peruana García León (2h:39:16) que ha logrado de una tacada las dos primeras medallas de la historia de su país en unos Mundiales de atletismo.
“He soñado con pillar a la china porque la iba recortando y al final se me ha escapado la medalla de chocolate. Ha sido un año difícil pero al final ha sido el mejor a nivel de Mundial así que muy contenta. He pasado por varios problemas de salud, incluyendo una mononucleosis, y físicos, y no ha sido fácil aunque aún así hemos logrado adaptar la preparación para llegar a tope. Los ritmos de Kimberley eran imposibles y si entraba en esa lucha podía quedar muy atrás, había que ser paciente y seguir mi ritmo”, aseguraba Raquel a los medios españoles. Por su parte, Laura decía: “Creo que lo he hecho bien, he sabido escucharme y lo he dado todo. No podía dar más aunque obviamente me habría gustado unas posiciones un poco más arriba”.