A la final... con caída incluida

Las 9:37 de la mañana quizá no sea la mejor hora para jugarse el pase a una final de un Europeo, pero los horarios de los organizadores de Múnich distan mucho de tener mucha lógica... Carolina Robles e Irene Sánchez-Escribano saben que están ante una gran oportunidad de hacer algo importante en este certamen continental, pero antes debían pasar la criba que les haga jugarse las medallas el sábado (22:13). Ambas estarán entre las 15. Irene por puestos (4ª con 9:41.12) y Carolina por tiempos (7ª con 9:45.70)... aunque en el caso de la brava sevillana de 30 años con susto incluido.

Lo cuenta ella misma a AS: “Me he encontrado con las piernas entumecidas y me he enganchado en el obstáculo. Ha sido un toque pequeño pero me he ido al suelo. Me he levantado lo más pronto que he podido, he empezado a contar cuántas atletas tenía delante para calcular la clasificación y me he puesto a correr como una loca”. Activación rápida de cuerpo y mente: “Iba controlando el tiempo porque sabía que si bajaba de 9:47 entraba y me he quedado atrás para no gastar más fuerzas... que ya había gastado suficientes. No me he hecho daño y espero no estar dolorida, ha sido simplemente la caída. En la final partimos de cero de nuevo y espero poder tener una gran actuación”.

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Más relajada fue la prueba de Irene, incluso antes de la salida: “Al ver los tiempos de la otra serie he pensado que corriendo a un ritmo normal, pasábamos. Iba mirando a la pantalla y no he esprintado porque no hacía falta. Correr tan pronto se ha notado, estaba como un poco dormida”. A la toledana de 29 años se le ilumina la cara cuando se le pregunta por qué esperan en la final: “Hay algunas bajas importantes en la prueba... yo voy a salir a correr todo lo que pueda y ojalá nos llevemos una alegría”. La tercera española presente en la prueba de Múnich, Blanca Fernández de la Granja, fue eliminada al ser 12ª en la primera eliminatoria con 10:00.26.