Katie Taylor se hace eterna en una oda al boxeo Serrano

Intercambiando golpe por golpe. Así acabaron Katie Taylor y Amanda Serrano su combate. No podía ser de otra manera. Era un duelo de leyendas y demostraron el por qué de esa definición de ambas. La oda al boxeo fue mayúscula. El combate era histórico al ser el primer estelar femenino en la historia del Madison Square Garden de Nueva York. Nadie falló. El público abarrotó las gradas (se vendió todo, 19.187 fans), la atmósfera fue increíble y la pelea dejó claro que hace falta una segunda parte. La irlandesa se llevó el duelo por decisión dividida (97-93, 96-94 y 94-96) para retener los cuatro cinturones del peso ligero, hay opiniones de todos los tipos... y es que estaba claro que los jueces tenían la peor posición de la noche. Trabajo muy difícil para ellos este sábado.

Desde antes de que comenzase el pleito, los planes estaban claros. Katie necesitaba mantener en distancia a su oponente, y Serrano quería buscar la guerra de guerrillas. Dos visiones claras y solo dos minutos para puntuar cada round. Con tan poco tiempo, es muy difícil puntuar. Taylor comenzó mejor el combate, marcando mejor el ritmo, pero la local fue diésel y con el paso de los asaltos entró en calor. En el quinto acto, todo pudo cambiar. Serrano logró encerrar a la irlandesa contra las cuerdas. El ensogado debía de quemarle a la campeona y lo aprendió en ese asalto. Supo reponerse e intentar volver a mantener lejos a la de Puerto Rico. La igualdad era máxima y las dos salieron a jugarse el todo por todo en los dos últimos minutos. Los segundos finales ya son historia del boxeo. Ambas olvidaron las defensas, se centraron en tirar golpes y en intentar convencer a los jueces. La diferencia del duelo estuvo en un asalto, que pudo variar según la visión de cada uno, el boxeo es apreciación y en un pleito tan igualado, más. Taylor se lleva la victoria, no sin polémica en redes. La revancha, necesaria.