Todos los campeones mundiales españoles de boxeo
A lo largo de la historia, España ha tenido un total de 15 campeones mundiales en boxeo. El primero fue en 1935 y el último, Kiko Martínez.
Baltasar Berenger: Sangchili’, el pionero del boxeo español
Para encontrar al primer campeón mundial español hay que retroceder hasta 1935. El día 1 de junio, Baltasar Berenguer (Valencia, 1911), conocido como ‘Sangchili’ alzó el cinturón mundial en su versión IBU (no existían los principales organismos) en el peso gallo. Su apodo viene de un criado chino amigo de la familia (Sang Chi Li), buscaba que su padre no se enteraba de que boxeaba. Su Mundial lo ganó en Valencia ante el panameño Alf Brown. En 1936 debutó en Estados Unidos (lo hizo en el Garden de Nueva York), hizo una gira por ese país y en 1938 volvió a disputar el Mundial frente a Brown en París y en esa ocasión lo perdió.
José Legrá: El ‘Puma de Baracoa’ abrió la época de oro del boxeo español
El púgil cubano, nacionalizado español, derrotó el 24 de julio de 1968 a Howard Winstone en su casa para levantar el segundo mundial en la historia de nuestro país. Un año más tarde, de nuevo en Inglaterra, lo perdió ante Johnny Famechon. No había oportunidad de rendirse, Legrá siguió sumando combates, se alzó de nuevo con el Campeonato de Europa y lo defendió en cinco ocasiones. La oportunidad para tocar el cielo le volvió a llegar, fue en México en 1970. Ganó, pero al año siguiente de nuevo lo volvió a ceder. Sólo le quedaban dos combates más, una victoria y una derrota. Legrá colgó los guantes en 1973 con 148 combates a sus espaldas, su leyenda ya estaba vigente.
Pedro Carrasco: el estilista que saltó al papel cuché
El siguiente en tocar la gloria fue Pedro Carrasco. El 5 de noviembre de 1971 ganó el Mundial WBC del ligero al vencer, en Madrid al estadounidense Mando Ramos. Fue el inicio de una trilogía épica para nuestro boxeo. Las dos siguientes peleas (Los Ángeles y de nuevo Madrid) cayeron del lado del californiano. Eso no quita que Carrasco haya sido recordado como uno de los púgiles más talentosos de siempre. Solo perdió tres combate en sus 110 combates como profesional. Fuera del ring gozaba también de una extraordinaria popularidad, más todavía cuando se casó con la cantante Rocío Jurado.
Perico Fernández: el campeón que salió de un hospicio
El ascenso del aragonés (había tenido una infancia dura. No tuvo padres y se crió en un hospicio) fue vertiginoso y en sólo 41 peleas se plantó ante la oportunidad del mundial. 1974 fue su año, hizo su segunda defensa del Nacional, ganó el Europeo, lo defendió y ganó a Lion Furuyama en Italia por el Mundial superligero del Consejo Mundial. Perico no tenía límite y también se hizo con su primera defensa, pero con la segunda, en Tailandia no pudo y cedió el cinturón. Fernández también perdió en la revancha y aunque lo intentó esa derrota marcó un antes y un después en su carrera.
José Durán: el contragolpeador de Vallecas
En el inicio de los 70 empieza a destacar un Vallecano llamado José Durán. Había muchas esperanzas puestas en él y tras proclamarse campeón de España, en 1974 se consagra alzando el Europeo. Tras tres defensas le sale la oportunidad mundialista en Mónaco ante Miguel Oliveira. Pierda por la faja WBC del superwelter y mes y medio más tarde pierde el Europeo en Alemania. No se rinde y tras cinco victorias le llega de nuevo la gran oportunidad, de nuevo (1976). Viajó a Japón para vencer, por KO, a Koichi Wajima. Alzó el WBA del superwelter, un título que cedió cinco meses más tarde en Madrid. En 1978, tras perder por el Mundial WBC superwelter decide retirarse.
Miguel Velázquez: el boxeo más elegante de la época dorada
Miguel Velázquez había sido tres veces campeón de Europa del peso ligero, pero la oportunidad del mundial (1976) le llegó en el superligero y fue a por ella. El español se enfrentó a Saensak Muangsurin, al que ganó. Un combate de rodaje y cuatro meses más tarde tuvo su primera defensa ante el tailandés. En esa ocasión, Muangsurin sorprendió al español y le arrebató el título. Momento en el que decidió que su carrera profesión había terminado
Cecilio Lastra: el último campeón antes de la sequía
En 1977, Cecilio Lastra ganó el Mundial por la Asociación Mundial de boxeo del peso pluma. El cántabro ganó a los puntos a Rafael Ortega, pero en su primera defensa cayó en Panamá ante Eusebio Pedroza. Tras esa victoria, Lastra intentó regresar a la primera plana mundial, pero no lo logró cayendo en sendas intentonas por el Europeo. Ese año marcó una nueva línea descendente en el boxeo nacional.
Javier Castillejo: el ‘Lince’ rompe la sequía de 22 años
El ‘Lince de Parla’ rompió una sequía de 22 años. En 1999 abarrotó La Cubierta de Leganés ante Keith Mullings, Castillejo se apuntó el cetro del peso super wélter por el Consejo Mundial. Comenzaba el idilio del español más laureado de todos los tiempos. Tras ese ocho títulos mundiales más llegaron a su cintura. En dos categorías, super wélter y medio, y por dos organizaciones (WBC y WBA), algo que nunca ningún español había conseguido. Pero el legado de Castillejo va más allá de sus títulos, el de Parla vivió uno de sus combates más importantes en Las Vegas ante Óscar de la Hoya. El 'Lince' se retiró en 2008, aunque volvió para un último combate ante Pablo Navascues en 2009.
José Antonio López Bueno: el primer campeón WBO
José Antonio López Bueno fue el encargado de poner el nombre de un español en la Organización Mundial de Boxeo (WBO). El aragonés logro toda una proeza, ya que sumó el título mundial del peso mosca, en 1999, en su decimoséptimo combate como profesional, a pesar de ello lo cedió en su primera defensa, dos meses más tarde.
Jorge Mata: un campeón fulgurante
Jorge Mata tuvo una carrera fulgurante. El leonés ganó también el mundial WBO, esta vez en el peso mínimo en 2002 y lo hizo en undécimo combate (ganó el interino), en el segundo fue campeón oficial, pero en su primera defensa también lo cedió.
María Jesús Rosa: la sonrisa eterna que tocó la gloria
La primera mujer en tocar oro fue María Jesús Rosa. La madrileña, una de las pioneras del boxeo, ganó en Alcobendas el entorchado del peso mosca por WIBF (Organización con menor prestigio que las cuatro principales). Lo cedió en su primera defensa, que la realizó ante una leyenda como Regina Halmich. Esa fue su primera derrota y tras ese pleito decidió dejar el boxeo.
Gabriel Campillo: la grata sorpresa del ‘Chico Guapo’
Gabriel Campillo logró en 2008 y 2009 ser campeón de Europa del semipesado. Es raro encontrar españoles punteros en pesos tan altos, pero él era la excepción. Eso dos cetros continentales le abrieron la puerta para ir a Argentina a boxear contra Hugo Hernán Garay (junio de 2009). Era la víctima propiciatoria y sorprendió al mundo proclamándose monarca WBA del semipesado. Su primera defensa también buscaba lo mismo. Fue a Kazajistán a pelear contra el prospecto local. Volvió a ganar. Su segunda defensa fue en Las Vegas, en la que cedió ante Beibut Shumenov. Le llegaron posteriormente muchas oportunidades de primera nivel ante púgiles de la talla de Sergey Kovalev, Artur Beterbiev o Marcus Browne. No pudo volver a sorprender y se retiró en 2015.
Kiko Martínez: el “monje” que vive una segunda juventud
Kiko Martínez tuvo una carrera fulgurante. En 16 peleas, sin ganar el Nacional (se había llevado el Campeonato de la Unión Europea antes), disputó el Europeo del supergallo. Se fue a Dublín y venció al campeón. Perdió sus dos siguientes pleitos por ese cinturón y al tercero, de nuevo en Dublín, lo volvió a ganar. Su nombre en Europa tomó fuerza y tuvo recordado combate contra Carl Frampton. Perdió la opción de disputar el Mundial… a priori, porque seis meses después (agosto de 2013) le llegó la oportunidad. Fue a Atlantic City (Estados Unidos) como víctima propiciatoria y noqueó a Jonathan Romero para alzar el Mundial IBF del supergallo. Lo defendió ante Mathebula y Hasegawa. Eso le abrió la puerta de Frampton y volvió a caer. Durante muchos años y tras alguna derrota controvertida y por Mundiales, le quisieron retirar. Él siguió trabajando y confiando en sí mismo, así, en noviembre de 2021 volvió a ir de víctima propiciatoria a Inglaterra. Noqueó a Kid Galahad y se proclamó campeón mundial en su segunda división (pluma).
Joana Pastrana: la encargada de poner el boxeo femenino en el mapa
Joana Pastrana emergió como una exhalación. En ocho peleas se plantó en una eliminatoria Mundial. La perdió y se fracturó la mano y emergió su leyenda. Sus orígenes humildes y esa batalla la alzaron a la primera plana nacional. Rehizo su camino y logró ser doble campeona de Europa. El Mundial del peso mínimo le llegó en 2018. Dio un recital ante Oezlem Sahin y sumó defensas ante Siriporn Taweesuk y Ana Arrazola. Cedió su cetro en 2019 y en 2021, con tan solo 30 años, decidió retirarse. Lo hizo, eso sí, como campeona de Europa.
Miriam Gutiérrez: la ‘Reina’ no pudo con la leyenda
Miriam Gutiérrez decidió debutar en 2017 tras una larga carrera amateur. Fue quemando etapas y en 2019 ganó el Europeo del peso ligero. Ese cinturón le abrió puertas mayores. En noviembre de 2019 alzó el Mundial WBA Interino. Ese interinato se debía a que por encima estaba una campeona unificada y una de las mejores de la historia, Katie Taylor. Fue a batallar a Inglaterra y cayó con honores. Sigue en activo y su último pleito, en el que también cedió, fue contra otra leyenda como Amanda Serrano.
