La tensión se instala en Vigo entre los jugadores y el WPT
La organización española reclama 25 milones de euros en el caso de que sus contratados disputen la semana próxima el torneo de la Federación Internacional
Desde el martes se está disputando en Vigo la tercera prueba de la temporada, un Open que trata de ser nornal, una impostura profesional de todos los protagonistas, pero que en realidad el torneo viene marcado por el contencioso entre los jugadores, la empresa de WPT, y la Federación Internacional, que tiene programado y anunciado el primer torneo de la temporada de su Cicuito la próxima semana en Doha con la Premier, y que ha planteado un pleito contra WPT en la Comisión Europea por mantener lo que entiende como monopolio y posición dominante.
La Asociación (sólo los hombres) ha remetido hoy un comunicado en el que explican que han recibido una carta en la que WPT solicita 25 millones de euros a los jugadores en el supuesto de romper el compromiso que tienen por contrato de disputar exclusivamente los torneos del WPT, más allá de los compromisos no profesionales en que pudieran intervenir con sus clubes o sus federaciones, y exhibiciones.
Según explica la Asociación de Jugadores, WPT pretende conseguir un laudo en la CIMA, Corte Civil y Mercantil de Arbitraje, en la que solicitra una indemnización de 12,5 millones de euros de los 20 primeros jugadores del ranking, y otros 12,5 millones del resto que tienen contrato. En Doha están anunciados todos los mejores, salvo Agustín Tapìa (Sanyo jugará con su sobrino) y Miguel Lamperti.
Deportivamente no se ha quedado ninguna notable fuera de los octavos de final, en una jornada de miércoles que ha superado la medianoche. Destacable el partido de más de dos horas de duración entre los ganadores, Lima y Maxi Sánchez, ante Yanguas y Nieto: tuvo de todo, y hasta polémicas, que arrastraron a los jóvenes a perder el dominio del partido, que resultó espectacular: 1-6, 6-3 y 6-4.