Severo correctivo final de Sanyo y Tapia a Lebrón y a Galán

En el segundo torneo de la temporada Gemma Triay y Alejandra Salazar repiten el éxito de  Miami, mientras que Sanyo Gutiérrez y Agustín Tapia logran el primero del curso para sus intereses. La final femenina fue larga y compleja, y la masculina casi eléctrica y dominada de punta a cabo por lo ganadores.

6-2 y 6-2, con Juan Lebrón sin poder defender con éxito alguno de sus saques, fue el marcador de la final masculina. Los números uno están lejos de su mejor forma, y ni Galán ni Lebrón encontraron la manera de herir a Sanyo y Tapia. Es más, Sanyo dominó el partido con una defensa ofensiva veloz y feroz, y Tapia ejecutó a los números unos con golpes impensables.

Los ganadores hicieron un partido completo en el que desesperaron a los españoles, con demasiados errores no forzados por la necesidad de ir al límite para puntuar, ante un Sanyo crecido y un Tapia determinante.

Antes, la final femenina fue una peonza de altibajos de casi tres horas de juego para un 6-3, 6-7 y 6-1 de las número uno frente a las dos, Ari Sánchez y Paula Josemaría. Parecía el partido era claro para Ale y Gemma, con un set ganado y 4-1 en el segundo. Pues no. La reacción de Ari y Paula fue tan agresiva que ganaron la manga de casi 85 minutos, en la muerte súbita, con susto incluido, porque tras encarrilar el juego 13, se les puso en contra.

Quedaba el tercer set. 6-1 parece un paseo, pero es engañoso. Errores no forzados de Paula al cruzarse en la red, o de Ari con la volea que domina con  soltura, dejaron el camino expedito en tres mangas, y tras ganar la primera encajaron un 0-6 descorazador. Era la revancha de Miami, pero no se consumó ni en la casa de Ari Sánchez, a quien se le atraganta la pareja con la que ha perdido seis finales.