La vuelta de Muratovic ilusiona a los seguidores del At. Novás

Alen Muratovic (10 temporadas en el Cangas entre dos épocas, y dos en el Valladolid) se retiró en junio a sus 42 años y 1.506 goles en la Asobal en 373 partidos. Una lesión en el hombre cuando jugaba en el Flensburg alemán (compró su contrato al Valladolid por 600.000 euros, aún uno de los fichajes más altos del balonmano) le provocó una retirada prematura, de la que salió por amistad con el presidente del Cangas. Y ahora "para echar una mano en la División de Plata", cuenta el montenegrino afincado en Cangas, y con su familia gallega.

En junio dijo basta tras jugar muy poco en la recta final de la temporada. Estuvo a punto de jenrolarse con el Teucro, pero no prosperó. "Tenía ofertas para seguir, pero tenia claro que no iba a cambiar mi casa. Vivimos en Cangas, y si podía seguir tendría que ser en un equipo de la zona", comenta el lateral de 1,97 metros.

"Ya no pensaba en jugar...pero llegó la ocasión", relata, que no es otra que reforzar al Atlético Novás para la segunda vuelta, de O Rosal, a una hora de coche de su casa. Debutó con su nueva camiseta frente al Alcobendas en Madrid "y ganó el Novás" que ha vencido en cuatro de sus últimos cinco partidos, y ha saltado del sexto al segundo puesto del grupo a falta de tres jornadas para acabar la primera ronda.

La meta es entrar en el grupo de ascenso (cinco equipos de cada una de las dos previas) al que se arrastran los resultados con los equipos con que ya se ha jugado. "Esa es la meta y lo que me ilusiona como sin fuese un juvenil" asegura el que posiblemente sea el jugador de mejor historial en la categoría. De momentos, ha ganado al Villa de Aranda y al Alcobendas, dos de los llamados a pelear por el ascenso "pero yo no soy un jugador importante, sino uno para hacer grupo y muy contentó con nuestra afición que tanto nos apoya" asegra el veterano montenegrino