Las fugas y el confinamiento ocultan a la Copa Presidente
Cuatro camerunesas dejan su selección para quedarse en Europa, y China se recluye en el hotel con la organización si saber qué hacer
Desde que en la tarde del jueves se supo que China abandonaba el Mundial porque se sometía a su reglamento nacional respecto a las pandemias, nadie sabe qué ocurre desde este momento con la selección del coloso asiático. Al equipo le quedaban tres partidos por delante en Llíria, que no jugará. Sólo ha tenido un positivo, pero lo que para otras selecciones se limita a retirar a la infectada y seguir adelante, China lo extrema: ella tendrá que pasar seis semanas confinada, y sus compañeras al menos dos, y siempre que no den positivo.
Más de veinte personas (toda la delegación) varadas en un hotel de Valencia, que ya no están en el Mundial, crean un problema logístico. Nadie sabe qué va a pasar ni cómo van a actuar desde ahora, ni siquiera qué hay que hacer por protocolo. La cuarentena deberá correr a cargo de China, pero dónde y cómo aún está en el aire.
Esta tarde un portavoz de la organización sólo era capar de contestar con un ·"sin noticias de la Embajada, siguen en el hotel", muy disciplinadas, con riguroso orden, todas en sus habitaciones,. de dos en dos, menos la que ha dado positivo, sóla.
A la organización, de repente, y en la Copa Presidente reservada a los equipos descartados para que jueguen al menos seis partidos tras un largo desplazamiento en algunos casos, se ha visto desbordada porque donde ya no estaba el foco de atención deportivo sí lo está el mediático: ¿dónde están las cuatro camerunesas que han dejado el equipo?
¿Han desaparecido? Parece que es un abandono decidido con antelación para quedarse en Europa. Se han llevado sus cosas, todas sus pertenecias, y por ahora nadie sabe dónde se encuentran. La alarma no lo es en realidad: son mayores de edad, con visado legal, y personas libres en España, pero desprende un tufillo. Por ejemplo, los periodiodistas cameruneses acreditados en el Mundial tenían que demostrar de manera fehaciente que tenían esa credencial aceptada por España para que les dejasen venir a Valencia, y en Camerún, por ahora la noticia ni aparece en los digitales.
Unas, por el encierro, y otras por su escapada, ocultan el aspecto deportivo de la Copa Presidente. La apuesta deportiva de la IHF con su megalómano Mundial de 32 selecciones no le está saliendo todo lo bien que planteaba. Menos mal, pensará, quue los gastos son por cuenta ajena, de España.