La Federación Española y la Vasca se enfrentan por un Europeo
Según recoge Iusport, ha informado al CSD está en contra del campeonato que organiza la Vasca, integrada en una asociación que no reconoce la Internacional.
La Federación Española de Pádel se ha desvinculado de la FEPA, entidad europea no reconocida por la Federación Internacional de Pádel (FIP), que sigue vigente y por tanto, se desmarca de la competición internacional que ésta pretende celebrar en el País Vasco a principios de octubre bajo la organización de la Federación Vasca de Pádel (FVP) según publica Iusport, que mantiene que la FEP no reconoce oficialidad alguna a dicha prueba, ni se le presta apoyo de ningún tipo, y refuerza su compromiso con la FIP, organismo al que pertenece como federación miembro.
Desde 1995, todos los Campeonatos de Europa de Pádel han sido impulsados y organizados por la Federación Internacional de Pádel. España lo ha avalado así con su presencia constante excepto en el Europeo de Roma de 2019, en el que el anterior presidente de la FEP decidió no presentar a las selecciones españolas y sí acudir a un torneo simultáneo (en las mismas fechas) que la FEPA organizó en Lisboa.
El Campeonato de Europa, la competición oficial de la FIP, se ha celebrado en el mes de julio de este año en Marbella (Málaga), tras 14 años sin disputarse en suelo español. Las selecciones masculina y femenina de España se hicieron con la victoria ante Italia y Francia, respectivamente.
El pasado 3 de agosto, sostiene Iusport, la FEP tuvo conocimiento de la organización del torneo de la FEPA en el País Vasco y se informó directamente al Consejo Superior de Deportes subrayando que dicha competición no cuenta con el consentimiento ni el apoyo de la Federación Española que no lo ha incluido en su calendario de competición.
La FEP resalta que no ha recibido solicitud alguna por parte de la Federación Vasca acerca de su afiliación a la FEPA y, desde luego, no ha concedido ningún permiso al respecto. La Asamblea General de la Federación Española aprobó la renuncia a formar parte de la FEPA el 31 de octubre de 2020. La medida obtuvo el respaldo del 75 por ciento de los asambleístas.
Con todo esto, y más allá de que la FEP no tiene competencia alguna para decidir sobre la integración de la Federación Vasca en la FEPA, difícilmente la Federación Española hubiera aprobado esta incorporación cuando la propia Federación Española acababa de formalizar su salida del organismo europeo.
Desde la FEP se señala que la presencia de la Federación Vasca de Pádel en la FEPA responde a una voluntad propia que va más allá de la vinculación de la Federación Española a este organismo. El propio presidente de la FVP, Jorge Peñín, reconoce la posible continuidad de la Federación Vasca en la FEPA incluso ante un posible regreso de la Federación Española.
La Federación Española subraya que nunca ha aprobado ni respaldado este posicionamiento de la Federación Vasca que, con sus hechos, se desmarca de una decisión adoptada por amplia mayoría en la Asamblea General de la FEP, en la que tiene representación la propia Federación Vasca, así como clubes y deportistas vascos asegura Iusport.
Cabe recordar que fue Alfredo Garbisu, expresidente de la Federación Española y hoy integrado en la Junta Directiva de la Federación Vasca de Padel como vicepresidente segundo e internacional, uno de los principales promotores de la FEPA cuando era presidente de la FEP (2016-2020). Para permitir la integración en la FEPA de la FVP, la única federación representante de una comunidad autónoma, dicha entidad tuvo que modificar incluso sus estatutos, lo que evidencia la anormalidad de la situación. Desde la Federación Española de Pádel se advierte del peligro que este tipo de posicionamientos generan al abrir la puerta a discursos políticos que no tienen relación con el deporte.