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KICK BOXING

Juan Martos alcanza la centena

Juan Martos pelea este sábado en el evento Golden League que se disputará en Canovelles (Barcelona). Será su pelea número 100 como profesional.

Actualizado a
Juan Martos.

El contador de Juan Martos pasará a las tres cifras este sábado. El catalán, de 41 años y dos veces campeón mundial, disputará su pelea número 100 como luchador profesional. La barrera de la centena es un límite que muchos quieren superar, pero pocos pueden hacerlo. Pese a ello, para Martos "será una pelea más". "Para mi todas son iguales. Debo entrenar duro para dar lo mejor", admite antes de subirse al ring el sábado en el evento Golden League que se celebra en Canovelles (Barcelona) y donde le espera el congoleño Sedrik da Silva.

La historia de Martos es curiosa. Mas de 20 años de profesional, ha ganado todo lo posible... y su carrera empezó de casualidad. "Cuando estaba en la mili (casi con 19 años), un compañero me enseñó algunos conceptos básicos. Me dijo que se me daba bien y que no lo dejase pasar. Al volver a casa me apunté a hacer full contact. Ahí me enganchó y hasta entonces", reconoce. Una gran casualidad para el catalán, quien nunca ha dicho que no. "Mi carrera la he basado en el día a día. El secreto de mi éxito ha sido la constancia, he sido un luchador regular, siempre he estado entrenando no he parado y retomado con cada pelea. No me he puesto metas, pero tampoco he rechazado nada. Para mí lo bonito es llegar y hacer lo que parece imposible. Si estoy preparado no le tengo miedo a nadie", admite.

Pese a dejar que todo fluya, y quedarse "con la sensación de pisar el ring", Martos tiene claro su mejor momento: "Fue cuando me proclamé campeón mundial en Getafe. La emoción de poder levantar el cinturón y romper a llorar fue increíble", apunta. Llegar a los 100 era algo que "tenía como objetivo", pero ahora no se mete prisa. "Sé que me queda poco. Tengo una pelea cerrada en Madrid y otra en Manchester para los próximos meses. Me gustaría hacer el próximo verano un combate de despedida en mi pueblo, pero no me cierro a que llegue una oportunidad y aceptarla", concluye.