Preolímpico sin red
La Selección afronta desde este viernes el preolímpico. Escobar y Quiles ya están en Tokio y hay cuadro púgiles con opciones. España no clasifica más de dos desde Barcelona 92.
EI boxeo ha vivido quizá el proceso de clasificación para los Juegos de Tokio más rocambolesco. Primero el COI inhabilitó a AIBA y tomó el control del torneo. Lo dejaron todo para 2020 y la pandemia hizo estallar los planes. Los preolímpicos de África y Asia/Oceanía se pudieron disputar. El de América no llegó a ello y el Europeo comenzó en Londres en marzo del año pasado y se retoma este viernes, y hasta el martes, en París. Además, se ha suprimido el preolímpico de repesca y para esas plazas y las del continente americano se ha creado un ranking con los últimos torneos mundiales y continentales.
En esa ecuación España sale perjudicada, ya que no acudió al último Mundial y juega sin red. Gabriel Escobar (52 kg) y José Quiles (56 kg) ya tienen su billete a Tokio asegurado. El primero, de 24 años y actual monarca continental, buscará ganar el torneo desde mañana, pero el segundo no podrá competir hasta la cita japonesa por una lesión en un pleito previo. El objetivo está logrado, pero quieren más. España no logra clasificar a más de dos púgiles desde Barcelona 92, donde acudieron ocho españoles. Por tanto, el objetivo es claro: quieren romper esa marca con Melisa González (60 kg), Miguel Cuadrado (75 kg), Gazi Jalidov (81 kg) y Enmanuel Reyes Pla (91 kg). En la Federación hay optimismo y esperan, al menos, volver con un par de billetes más para Tokio. Los cuatro con opciones necesitan dos triunfos para clasificar, pero sus situaciones son diferentes.
Reyes Pla, que debuta este sábado, es el que más difícil lo tiene, ya que necesita ganar sí o sí sus dos próximas luchas, pero también es el más experimentado (entre Cuba y España supera, a sus 28 años, las 300 peleas). González, Jalidov y Cuadrado, quienes se estrenan este viernes, deben ganar su primer choque y si pierden el segundo entrarían en un play-out que les daría la plaza si ganan, pero "eso no entra en sus planes", asevera Cuadrado. El vallisoletano, de 27 años, llega en un gran momento de forma y con ganas de revancha. Hoy se enfrenta al eslovaco Andrej Csemez, quien le arrebató el bronce en el Europeo de 2019. "He mejorado mucho y voy a demostrarlo. Si pelease contra mi yo de ese torneo, me noquearía", añade.