Chus Martín: "Irme con otra Champions sería la guinda"

¿Por qué ha decidido dejar el Atlètic-Barceloneta?

Son muchos años. Lo dejo, pero para involucrarme en otro proyecto. Si no encontrase nada interesante, me tomaría un año sabático, pero mi idea es seguir.  Cuando estás muchos años en un mismo club o en un vestuario, al final cuesta más llegar al jugador. Llevo ocho años de entrenador y otros siete de asistente aquí.

¿Ya tiene ofertas?

Nadie de España me ha llamado. Y eso le ha pasado a muchos entrenadores, como Ballart o Chava. Es triste que a veces tengas que salir fuera para seguir tu carrera. Quizás me ven inalcanzable porque vengo del Barceloneta. Hay clubes que están siempre y quieren hacer algo más, podría empezar un nuevo proyecto.

¿El tiempo es el mayor peligro del entrenador?

Cuando me hice cargo del equipo fui un aire fresco. Los jugadores vieron cosas nuevas. Y en mi primer año ganamos la Champions. Ahora creo que pasamos por la misma situación. Al jugador le irá bien tener un cambio de entrenador. He visto crecer a los jugadores. Munarriz era un chavalín cuando llegó y el resto han ido madurando también. Los jugadores evolucionan, tienen su opinión, su manera de ver las cosas también.

¿Qué exige el jugador de waterpolo?

Es un deporte duro donde no ganas demasiado dinero. Los jugadores lo viven con pasión. Se desviven, como yo. Y este año más: pueden conseguir una medalla olímpica. Que estés en un equipo en el que crees que puedes ganarlo todo pasa muy pocas veces. Y ahora pasa en el Barceloneta y en la Selección.

¿Qué diferencias hay entre ustedes y el resto de equipos Champions?

En Europa hay muchos clubes que nos duplican el presupuesto. Los jugadores del Pro Recco pueden ganar cuatro veces más que los nuestros. Tienen dos boyas en la grada, que son de los mejores del mundo, y una plantilla de 16 jugadores.

¿Cree que aspiran al título?

Hay que ir partido a partido. Jugamos los cuartos de final ante Olympiakos, que tiene experiencia y ha jugado la final en los dos últimos años. Tiene dos americanos, nos dará guerra aunque quizás han bajado algo el nivel. Vamos a intentar ganar, pero hay que ir paso a paso. En semifinales podríamos encontrarnos al Recco. Allí, si llegamos hay que hacer el partido perfecto. El camino es muy difícil, pero no hay nada imposible. En 2014 no éramos favoritos y ganamos.

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¿Qué recuerda de aquel título y cómo vivió un año difícil para usted?

Fue un año difícil. Cogimos (su hermano David Martín y él) el equipo con ilusión, pero tuvimos la enfermedad de mi padre. Días antes de su fallecimiento, en marzo, decidimos ir a Dubrovnik con el equipo. Eso fue un motivo de fuerza para ellos. El presidente y los jugadores dijeron que no fuéramos, pero ganamos allí, donde nunca lo habíamos hecho. Nos dio confianza.

¿Cómo ha cambiado el waterpolo?

Todo es más dinámico, no puedes pensar, la toma de decisiones es más rápida. España ha sacado provecho del nuevo reglamento. Esta es la evolución de la Selección. Italia también tiene ese estilo. Ambos llegaron a la final del Mundial de 2019.

¿Les beneficia tener una liga poco competitiva?

No sabes si es mejor tener una liga más competitiva, como ha pasado en Italia o Hungría, donde los equipos de esta final a ocho de la Champions no han ganado sus ligas. Nosotros no tenemos esa igualdad, pero eso nos permite entrenar mejor. Puedes preparar el fin de semana el partido de Champions. Pero no se puede saber qué es mejor porque no tuvimos lo otro. Es bueno que haya competencia. Hay que motivar mucho a los jugadores. Quería ganar esta liga y sumar ocho en los mismos años.

¿Habla siempre de waterpolo con su hermano?

Hablamos siempre de waterpolo y de los jugadores que compartimos. El 80% del Barceloneta son parte de la Selección, y comentamos su evolución. Compartimos información.

¿Qué supondría para usted este título?

Empezar ganando la Champions y acabar igual sería la guinda. La tranquilidad sería máxima. Me voy tranquilo, di siempre mi máximo.