"Poli Díaz fue detenido al ir a renovar el DNI"
Antonio Ricobaldi, representante del 'Potro de Vallecas' habló en EFE sobre la detención del boxeador, que está en prisión preventiva hasta junio, cuando irá a juicio.
"Me gusta decir que en España ha habido tres grandes leyendas: Lola Flores, Camarón y Poli Díaz". Así de tajante se muestra Antonio Ricobaldi, CEO de la promotora Unlimited Global Challengers y representante del 'Potro de Vallecas', actualmente en prisión provisional en Las Palmas a la espera de fecha de juicio por un posible delito de lesiones.
Poli Díaz reside con su pareja en Las Palmas, desde dónde se estaba preparando para volver a subirse al ring en un combate de exhibición en Madrid a finales de este año. Su representante, Antonio Ricobaldi, asegura a EFE que en Canarias Poli llevaba "una vida normal, sin malos hábitos, algo que ya no vende a nivel mediático".
Para el recuerdo momentos estelares como aquel 27 de julio de 1991, en el que España se paralizó para ver el combate de Poli Díaz por el título mundial del peso ligero contra el estadounidense Pernell Whitaker, con el que perdió en Norfolk (Estados Unidos) a los puntos. Fue el punto álgido de una carrera deportiva que después se esfumó a velocidad de vértigo por los excesos y las adicciones.
- ¿Qué ha ocurrido con Poli Díaz?
- Poli fue detenido, le pusieron a disposición judicial por parte de la Policía Nacional y el juez de Instrucción, del juzgado número 7, decretó prisión provisional puesto que tenía una orden de busca y captura. Esto venía remitido de un juicio que tenía en el juzgado Penal número 30 de Madrid al cuál no se había presentado. El magistrado concretó esa orden y al ir a renovar el DNI se quedó allí. Una cosa que nadie se esperaba.
- ¿Cuál es su situación ahora mismo?
- La situación es que está en la prisión de Salto del Negro, en Las Palmas, en el departamento de ingresos. Tiene que permanecer una semana allí por las medidas de seguridad derivadas del covid y después pasará a un módulo normal con otros internos. Esperamos que esté en prisión el menor tiempo posible aunque estará en prisión preventiva hasta la fecha del juicio. Están los abogados examinando el expediente y esperamos que la situación se subsane pronto.
- ¿Por qué no se presentó al juicio?
- Esto ha ocurrido porque le han cambiado varias veces el juicio. Tenía en principio fecha antes de que llegara el coronavirus, con el tema del Estado de Alarma lo cambiaron, cuando hubo la tormenta de nieve Filomena lo volvieron a cambiar y en la última fecha se le pasó. No es una cosa que haya hecho aposta. Está llevando una conducta perfecta.
- ¿Esta situación complica el combate que estaba previsto a finales de este año?
- Realmente se complica un poco el tema del combate porque no tenemos fecha exacta de juicio, se corta la preparación exhaustiva que estaba teniendo y también toda la promoción y la prensa que estábamos realizando. No solo era un combate de Poli contra su contrincante, sino que había otros deportistas de renombre internacional.
- ¿Cómo se estaba preparando Poli para ese combate?
- Su vuelta estaba causando mucha expectación. Estaba muy ilusionado porque no deja de ser una pelea de veteranos, con otro de su quinta, en un combate de exhibición. Es una cosa parecida a lo de Julio César Chávez o lo de Myke Tyson con Roy Jones. Poli estaba muy contento porque es un campeón y el que es campeón lo lleva dentro para toda la vida. El contrincante se ha llevado un varapalo también.
- Si no pudiera ser este año, ¿se intentaría el combate para 2022?
- Sí, pero tenemos un hándicap que se suma. Con la Federación de Boxeo estamos teniendo problemas para que nos dé la licencia y otra federación internacional nos iba a conceder esa licencia. Al haber ocurrido esto, todo se complica un poco y pueden ser reacios a darla para que Poli se suba de manera legal y oficial al cuadrilátero.
- ¿Cómo es la vida de Poli en Las Palmas?
- Se sabe poco porque estamos siendo muy neutros. Estamos llevando la comunicación y hablando sobre el combate, pero no sobre su vida privada. Antes los medios de comunicación lo sabían por los malos hábitos y ahora que no hay, no interesa. Es una vida anodina, como cualquier hijo de vecino o ciudadano normal.
Lleva una preparación buena en el gimnasio, no es como la que tenía cuando competía, pero una cosa que tiene Poli es que a primera hora, a las 6.30, sale a correr. Tiene un motor muy fuerte para la edad que tiene. Está delgadito, pesa setenta y tantos kilos y está hecho un figurín, le quedan los trajes impecables.
- ¿Cómo se fraguó esa vuelta de Poli para volver a boxear?
- Se me ocurrió debido a lo de Mike Tyson, aunque antes tenía la idea de hacer un combate conmemorativo de Poli contra alguien de su envergadura y trayectoria, pero también retirado.
Cuando yo era pequeño y Poli era joven, yo estaba en un portal de Lavapiés (barrio de Madrid) y él me regaló 500 pesetas para que fuera al cine. Me metí a ver la película Rambo 3 y otra de Jean Claude Van Damme 'Contacto sangriento'.
A partir de ahí, ya de mayor, me empecé a dedicar al tema de los deportes de contacto y los combates y decidí ir a buscar a Poli a las Islas Canarias. Le enseñé lo que había hecho Tyson y Julio César Chávez, me dijo que adelante y nos vinimos a Madrid a preparar el show, porque Poli, en sí mismo, ya es un show.
- ¿Han notado el calor de la gente al anunciar su vuelta?
- Poli es una figura muy mediática. Me gusta decir que en España ha habido tres grandes leyendas: Lola Flores, Camarón y Poli Díaz. Es increíble. Por la Gran Vía no puede caminar. Eran mil fotos diarias. Por eso preferimos estar en Canarias. Una cosa que me llamó mucho la atención es que la gente de treinta años en adelante le conocían, pero también la gente más joven. Tiene algunas canciones que se han hecho a su nombre legendarias como las de Marea, Los Chichos o el rapero Poli Díaz Army. Era desconocedor de que gozaba esa fama dentro del mundo juvenil.