Crouser se amenaza a sí mismo
El lanzador estadounidense realizó un sensacional concurso en el que igualó el segundo mejor tiro de la historia indoor y mostró que puede elevar más el récord.
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Ryan Crouser está de dulce. Si hace una semana batía el mítico récord de lanzamiento de peso bajo techo que tenía Randy Barnes desde 1989 con 22,66 hoy en el mismo lugar donde se fue hasta 22,82, Fayetteville (Arkansas), el campeón olímpico en Río realizó un sensacional concurso que en todo momento parecía que uno de los lanzamientos rompería ese tiro de 22,82.
La serie de Crouser fue espectacular: 21,40; 22, 66 (igualando lo conseguido por Barnes hace 22 años); 22,19; 22,26; 22,65; y 22,43. Todo lanzamientos que podían valer una medalla en estos momentos en unos Juegos o en un Mundial. Espectacular. Y en el horizonte pocos dudan que los 23,12 de Barnes al aire libre pueden caer perfectamente este mismo año. Crouser es el rey del peso.