NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ATLETISMO

Un tumor cerebral se cobra la vida de Alejandro Gómez

El exatleta vigués, tres veces olímpico y uno de los grandes del fondo, falleció con 53 años al no superar un cáncer cerebral inoperable que se le detectó en junio.

Un tumor cerebral se cobra la vida de Alejandro Gómez
RFEA

Alejandro Gómez Cabral, uno de los grandes del fondo español, falleció hoy a los 53 años después de pasar varios meses luchando contra un tumor cerebral que se le detectó en junio y que los médicos consideraron inoperable.

El estado del vigués, que vivía en su domicilio de Zamáns, habÍa empeorado en los últimos días y su familia confirmó hoy su fallecimiento.

Alejandro Gomez (dcha.), Alberto Juzdado (delante) y Javier Caballero durante el maratón de los Mundiales de Múnich.
Ampliar
Alejandro Gomez (dcha.), Alberto Juzdado (delante) y Javier Caballero durante el maratón de los Mundiales de Múnich.

Gómez fue tres veces olímpico en Seúl 1988, Barcelona 1992 y Atlanta 1996. Acabó noveno en los 10.000 del Mundial 1991 en Tokio. En maratón, fue quinto en el Europeo de 1998 y sexto en el de 2002.

Habitual del cross (campeón de España en 1989 y 1995), también fue campeón nacional de media (1992 y 2003) y en cinco ocasiones de 10.000. El 'Galgo de Zamáns' formó parte de un grupo de atletas de leyenda que se retroalimentó entre sí. Tanto, que fue capaz de quitarle el récord de maratón a Martín Fiz en la Maratón de Róterdam (2.07:54) en 1997.

LOS PERROS, SU GRAN PASIÓN

Forjado al lado del técnico gallego Julio Rodríguez, que le quitó el fútbol de la cabeza junto a su padre, Alejandro Gómez deslumbró desde joven. Fue líder mundial de 5.000 y segundo en 3.000 siendo juvenil.

Cuando le diagnosticaron el tumor, siguió disfrutando de su gran pasión, sus 25 perros, con los que competía en mushing, canicrós, patín y bicicleta. Al saber de la gravedad de su enfermedad, se casó con su pareja, Paula Hernández, que le acompañó en unos últimos meses que supo llevar con gran entereza.