La guerra Azerbaiyán-Armenia se llevó al tablero de ajedrez
Radjábov superó a Aronian en la final del torneo Airthings, los mejores jugadores de dos países en conflicto armado hasta el pasado 9 de noviembre.
El ajedrez es un deporte propenso a que le mezclen con la política. Ahí están los duelos entre Fischer y Spassky durante la Guerra Fría, la pelea de Spassky con el disidente Viktor Korchnoi, o los que sostuvieron Kárpov y Kaspárov, erigidos en representantes de bandos opuestos en los años de la Perestroika. El último ejemplo de esto se ha producido en la final del torneo Airthings con el triunfo para Teimour Radjábov
Levon Aronian, de Armenia, y Teimour Radjábov. de Azerbaiyán, han sido los protaginistas de esta primera final, con un premio de 60.000 euros para el ganador de esta competición por Internet. Son los dos mejores jugadores de dos países que han sostenido un pequeño conflicto armado entre septiembre y noviembre de 2020 por los territorios del Alto Karabaj, una zona en disputa desde hace muchos años.
El choque comenzó este sábado, con victoria de Radjábov en el primer encuentro. Se trata de un niño prodigio que ya está en la treintena, pero con sólo quince años derrotó a Kaspárov en Linares, y está entre los diez mejores del ránking mundial de juego clásico Ninguno quiso correr riesgos en las tres primeras partidas y firmaron tablas. Fue en la cuarta cuando Aronian se precipitó y cometió un error fatal que le dio el triunfo a su rival. Ninguno de los dos ha manifestado animadversión o rivalidad más allá de lo puramente deportivo y de hecho ambos jugadores son conocidos por su carácter tranquilo y conciliador. Ni siquiera son agresivos en su manera de jugar.
Este domingo en el segundo y definitivo duelo: cuatro partidas al ritmo de 15 minutos por bando y 10 segundos de incremento por jugada. Radjábov sacó adelante la primera partida con unas tablas que le rescataron de una derrota que parecía clara. Luego ganó la segunda partida, y en la tercera pudo levantar el puño en señal de ganador.
El Airthings es el segundo torneo por internet del Champions Tour y uno de los considerados Grand Slam. Está dotado con un premio de 60.000 euros para el ganador y en él han participado, eliminados anteriormente por los dos contendientes de esta curiosa final, otras figuras mundiales como el noruego Magnus Carlsen o el ruso Ian Nepomniactchi.