Las Guerreras ya están en su reclusión de Silkeborg

Las Guerreras han estrenado hoy el primer viaje internacional de las selecciones de balonmanos españolas que utiliza un vuelo privado para un desplazamiento, porque sólo los 26 componentes de la expedición, más el personal de cabina del avión de Ibera, ha hecho el viaje desde Madrid a Dinamarca. Luego, hasta el hotel en la ciudad de Silkeborg, a 45 kilómetros de la sede donde jugarán sus partidos del Campeonato de Europa femenino a partir del jueves (debutan ante Rusia, 18:15 por Teledeporte).

Con 16 jugadoras y diez acompañantes, entre técnicos, delegadas, y personal médico y de servicios, todo el grupo con su PCR negativa española se ha presentado ante los grupos sanitarios de la organización, y donde  han vuelto a pasar un nuevo PCR.

En el autocar se han hecho la distribución de las habitaciones, dobles para las jugadoras e individuales para el resto. Y con una orden tajante: queda prohibida la salida de la habitación hasta que no se reciban las pruebas del test de hoy mismo en Dinamarca. Por fortuna para la delegación española, todas las pruebas resultaron negativas.

En principio se espera que los resultados estén antes de la hora de la cena, porque de lo contrario se servirá al grupo cenas individuales en sus habitaciones respectivas. Y, por otra parte, tarde perdida: ni entrenamiento ni charla técnica a dos días del debut.