Dos Anjos despertó a Felder

El final del cuento no fue bonito para Paul Felder. Con cinco días de antelación aceptó pelear este sábado en el combate estelar del UFC Las Vegas 14. El estadounidense no quiso ventajas: cumplió con el peso oficial y el pleito se pacto a cinco asaltos. Su órdago era grande, pero era consciente de que iba a ganar más de lo que iba a peder. En este caso se lleva el respeto de la compañía y de sus aficionados. La victoria en el combate fue para Dos Anjos, quien se impuso por decisión dividida (50-45, 50-45 y 47-48).

Las opciones de Felder, que reconoció al terminar que el jueves fue uno de los peores días de su vida por el corte de peso, pasaban por los primeros rounds. No debía alargar la pelea, por ello sacó cada golpes con potencia. Dos Anjos lo sabía y con inteligencia fue alargando la pelea. Primero lo hizo con sus patadas y en minuto y medio llevó la pelea al suelo con una buena proyección. Felder salió, pero entre el derribo y que el brasileño sacaba mas ritmo, el round estaba claro. En el segundo la dinámica fue parecida. Felder intentó mantener alejado a su oponente con sus patas, pero cuando quiso Dos Anjos le vuelvo a encerrar. Al final del round, el estadounidense comenzó a llevarse más castigo. El cansancio comenzó a aparecer. Era lógico.

En el tercero Felder intentó cambiar la dinámica, llevar la pelea al suelo, pero acabó dominado. En el cuarto, cansado, pero con menos ritmo de Dos Anjos, el estadounidense se creció un poco. Incluso vio el hueco y derribó a Dos Anjos. El invitado a última hora se lo creía y no dudó en intercambiar golpes de inicio. Pese a ello, la explosividad se había esfumado. Sus opciones eran pocas (salvo para un juez que vio una pelea completamente diferente), pero no cejaba en su empeño. Tampoco cuándo estuvo en el suelo. Intentó salir de ahí, pero Dos Anjos controló y aseguró su victoria. Las previsiones se cumplieron y el sueño de Felder no fue completo... pero se llevó el respeto de todos. Un titán estuvo en el octágono en Las Vegas.