El Barça supera de nuevo los cuarenta goles en Europa

El castigo a la plantilla del Barça por los positivos en su plantilla es ejemplar: tres partidos seguidos y sin descanso. El primero, esta tarde de jueves ante el Aalborg en la Champions ha sido positivo para los azulgranas: 42-33 (20-18); Y ahora, el viernes Liga en casa ante el Benidorm (16:00), y el sábado en Pontevedra ante el Cisne. Posiblemente en los dos encuentros ligueros también supere los cuarenta goles, pero ya no podrá ser cuestión de admiración crítica por la flojedad de los españoles, porque en la Champions también supera esos cuarenta, como ya hizo ante el Zagreb (45) en el anterior choque.

Se podría decir que en Europa el más tonto hace relojes, y se vio en este encuentro. Dominaba el Barça con claridad en la primera mitad, se relajó en la recta final, y el Aalborg, que si con ataques con siete, que si con cambios defensivos, le robó balones y se fue al descanso con un 20.18 esperanzador.

Y ocurrió lo mismo al final, cuando el Barça se adormilo con una docena de diferencia y encajó un parcial que le rebajó la distancia a nueve. Vamos, que Europa obliga a la concentración los sesenta minutos, pero a esas alturas el equipo de Xavi Pascual ya tenía el pescando bien vendido para sumar su quinta victoria en la Champions, el único equipo que no ha cedido ni un punto.

Todo pasa por la defensa, y continúa por la velocidad manteniendo la precisión de jugadores como Palmarsson, Cindric o Mem. Y si luego la portería echa una mano y los extremos salen a mil por hora, aunque el rival sublime la carrera, es complicado rebajar la calidad azulgrana, que te devuelve las bofetada antes de que puedas celebrarla. Ese es el resumen de un encuentro en el que los barcelonistas mostraron las debilidades que se le supone a un equipo confinado cada jugador en su casa,