Países Bajos aparta a dos de sus técnicos acusados de abuso
La Federación paraliza el trabajo del equipo femenino para los Juegos Olímpicos y abre una investigación sobre Vincent Wevers y Gerben Wiersma
La Federación Neerlandesa anunció hoy que ha paralizado el programa de preparación de la selección femenina para los Juegos Olímpicos de Tokio para investigar los métodos de algunos de sus entrenadores, que han sido apartados tras denuncias por supuestos abusos. "Los entrenadores involucrados no tendrán un papel activo en el programa de entrenamiento de élite durante la investigación", dice la federación en un comunicado.
La suspensión se da a conocer días después de que la exgimnasta Joy Goedkoop asegurara, en declaraciones a la televisión pública NOS, que recibió "patadas y golpes" de Vincent Wevers, el actual entrenador del equipo nacional.
"Simplemente no te veía como un ser humano. No podías expresar emociones, sentimientos, dolor o fatiga. En realidad, tenías que funcionar como una máquina", añadió la deportista. Otras excompañeras de Goedkoop, como Loes Linders y Stephanie Tijmes, también han denunciado abusos por parte del equipo técnico de la selección.
Días antes, el exentrenador Gerrit Beltman reconoció en una entrevista que tuvo "comportamientos injustificables" contra miembros del equipo femenino de gimnasia. "Nunca tuve la intención consciente de golpear, insultar, lastimar o menospreciar, pero esas cosas sucedieron", declaró el extécnico al periódico "Noordhollands Dagblad".
Tras esa entrevista, algunas exgimnastas se pusieron en contacto con la federación para denunciar, de forma anónima, supuestos abusos de "miembros actuales del equipo técnico", dijo la federación, entre los que estarían los entrenadores del equipo nacional Vicent Wevers y Gerben Wiersma, apartados temporalmente. Vincent Wevers es el padre de Sanne Wevers, medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 2016 en la prueba de viga de equilibrio, y fue declarado en 2016 como "entrenador del año" por el Comité Olímpico Holandés.