Lyles puso el suspense con un 18,90 que pudo ser histórico
El estadounidense fue el protagonista de la cita. Su marca fue debida al viento y a que recorrió menos distancia que sus rivales.
Nombres como los de Noah Lyles, Allyson Felix, Shaunae Miller-Uibo, Christian Taylor, Chistophe Lemaitre y Churandy Martina, entre otros, componían el estelar cartel de los Inspiration Games, la cita de las siete sedes y la triple pantalla. El evento suponía uno de los primeros pasos en la vuelta a la competición tras los 'Juegos Imposibles de Oslo' (al margen de pértigas en jardines y autocines) y no decepcionó, con la alternancia de ocho pruebas que mantuvieron el dinamismo habitual de las citas de la Diamond League.
En esta transformación de la Weltklasse de Zúrich, que medía las fuerzas de atletas de tres equipos (Norteamérica, Europa y el Mundial), brillaron con luz propia Noah Lyles y Allyson Felix. Ambos velocistas llevaron en volandas a un combinado norteamericano que arrasó al resto de equipos, con un Lyles que fue el máximo protagonista del día. Firmó un registro de 18,90 en los 200 metros que en un primer momento pudo ser histórico, pero nada más lejos de la realidad. Tras mucha incertidumbre por parte de la organización y tras revisar el cronometraje, se determinó que Lyles había completado una distancia inferior a sus rivales, Martina y Lemaitre, de ahí el estratosférico tiempo, que también estuvo impulsado por un viento favorable de 3,7 m/s que habría impedido igualmente la homologación del récord. En los curiosos 150 femeninos, Felix también firmó una actuación brillante con un 16,81.
Tuvo que ser Pichardo quien rompiese el dominio norteamericano en la jornada con el triple salto. El portugués también estuvo impulsado por un viento que hizo de las suyas para alcanzar los 17,40, marca que queda en el limbo por viento ilegal. Pese a ello, prueba de muchísima calidad ya que los tres participantes superaron la barrera de 17 metros. En la pértiga, en otra de las pruebas estrellas de la jornada, Sam Kendricks impuso su ley. El vigente campeón mundial, con la ausencia de Armand Duplantis, estuvo prácticamente impecable sobre el listón y se llevó el triunfo con 5,81 m.
Y así concluyó esta toma de contacto del atletismo con la competición, marcada por el suspense del posible recórd de Lyles, rivales 'espiándose' en streaming en diferentes partes del mundo y los 39,08 de Moline en los 300 vallas femeninos como mejor marca mundial del año. El atletismo vuelve con fuerza.