Galán y Lebrón inician lo que parece una racha de títulos

La final masculina en el Madrid Arena estaba salpicada de mucho morbo e interés entre las dos parejas que jugaron la final del Master de Marbella, después de acabar la campaña de 2019 e intercambiarse entre los cuatro jugadores. Hoy, sin embargo, las condiciones de la pista madrileña eran favorables a Galán y Lebrón, porque su calidad en el remate prácticamente hacía imposibles los globos, y con la aerostación eliminada del catálogo de goles por improductiva, el alcance de los jóvenes es insultante e imposible para dos estrellas como Navarro y Lebrón, los primeros ganadores de la temporada,

Vencieron Lebrón y Galán, que por momentos se intercambiaron las posiciones, no con tanto descaro como hacían el año anterior Navarro y Lebrón: 7-5 y 6-3 en una hora de juego, sin intercambios, porque todos los tiros intentaban ser definitivos y a mil por hora.

En la primera manga fueron Paquito y Pablo los que lograron la primera ruptura, porque estaban controlando su juego, sin regalar nada, y con Lima siendo el que puntuaban con los remates. Pero con 4-5, todo cambió, y la pareja española empezó su particular presión para cazar todos los globos defensivos: dos rupturas un 7.5. A otra cosa.

Pero no hubo otra cosa. La dinámica del juego ya no cambió. Galán intentaba con éxitos paralelos imposibles, Lebrón encontraba ángulos en posiciones inverosímiles, y si la pelota flotaba, aquello era un manjar para los insaciables Lebrón y Galán. Por orgullo, porque son los números uno, Paquito y Pablo se anotaron tres juegos, para que fuese una derrota honrosa ante una pareja que a la segunda gana el primero de lo que será una racha de muchos torneos, porque con calor no se vislumbra que les puedan ganar, salvo que a ellos les de por los regalos, Y el siguiente torneo es en dos semanas también en el mismo escenario,