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VELA

María Torrijo: "Nunca he tenido trato de favor por ser mujer"

En 2007, con 31 años, fue la primera, aún es la única, mujer del mundo en conseguir las titulaciones de Juez Internacional, Árbitro Internacional y Oficial de Regatas Internacional.

Marçia Torrijo la única mujer en el mundo que es Arbitro, Juez y Oficial de Regatas Internacional.

En 2007, con solo 31 años, se convirtió en la primera, aún es la única, mujer del mundo en conseguir las titulaciones de Juez Internacional, Árbitro Internacional y Oficial de Regatas Internacional. También fue la más joven del mundo en poder ejercer las tres funciones.

¿Qué representó para Ud. ser la primera mujer que lograba las tres máximas titulaciones de la vela de alta competición?

 - Más que por ser la primera mujer, ya que no he recibido un trato distinto por ello, lo que más me ilusionó fue el hecho de que era la quinta persona del mundo en lograrlo. Fue mayor la satisfacción como persona que por ser mujer".

 Ud. ha sido ya oficial de regatas en dos Juegos Olímpicos y también lo va a ser en Tokio 2021 y todo apunta a que será la primera mujer en serlo en 170 años de historia de la Copa América. ¿Es la culminación de su carrera?

- Es un paso más. Esto debe confirmarse aún porque, en principio, el anterior Director de Regata de la Copa América, el canadiense John Craig, ya me había elegido. Hace tres semanas se ha nombró al australiano Iain Murray como nuevo Director y no se si querrá tener su propio equipo.

¿Ve algún problema?

- Yo nunca he trabajado con Murray y no he coincidido con él. De entrada íbamos a trabajar juntos en los eventos de las Series Mundiales de la Copa Anérica de Cerdeña y Portsmouth, que se han cancelado, y ahora mismo aún no puedo confirmar nada.

Ud. elige los campos de regatas, marca el rumbo a la flota según la dirección del viento, da las salidas de cada prueba, sanciona las irregularidades y controla las flotas. ¿Enfrentarse a campeones mundiales y olímpicos, a ganadores de la Copa América y a equipos millonarios le ha provocado problemas?

- Al principio, los equipos y los regatista venían junto al barco del Comité de Regatas y me decían: "Oye, por ser mujer no lo haces mal". Y siempre tenían esa sorpresa de ver una mujer al mando, pero se han ido acostumbrando y me respetan.

Eso le habrá costado ¿no?

- Con tanto en juego como había en las grandes regatas, desde algún barco se escapaba algún que otro insulto cuando se le señalaba alguna infracción. Eso pasaba alguna vez. Al principio sufría más, ahora ya me he soltado y ya se decirles todo lo que pienso en varios idiomas, porque he aprendido bastantes.

¿Hubo algún momento en que se emocionó en su trabajo?

- Hay bastantes, pero quizás cuando alguien como el legendario navegante neozelandés Grant Dalton, jefe del Team New Zealand y ganador de la Copa América, un ídolo para mí, venía y me decía "Ud. lo hace bastante bien" hoy aún se me pone la piel de gallina cuando lo recuerdo.

Ud. nació en Alicante, navega desde que tenía ocho años, fue instructora de vela en diversos clubes, compitió en la clase Vaurien hasta los 20 años y se licenció en Ciencias Químicas. ¿Cómo llega a esto de ser oficial principal de regatas?

- La vela me atrajo más que la química y me preparé para ser juez, árbitro y oficial de regatas. Cuando me llamó el 'Desafío Español', el equipo de nuestro país de Copa América en Valencia 2007, allí vi que era el momento de dedicarme profesionalmente a esto.

¿Y de que se encargó?

- Fui oficial de regatas y árbitro del equipo español. No fue un trabajo fácil. Salía todos los días al mar con el juez internacional Jordi Lamarca y fue muy divertido y esa experiencia me hizo más fuerte.

¿Le daban guerra los regatistas españoles?

- De entrada, eran barcos enormes (de 25,50 metros de eslora y 17 tripulantes) y para seguirlos llevábamos neumáticas gigantes con motores de 400 caballos. En los entrenamientos con los dos barcos españoles frente a frente a veces penalizábamos mal expresamente para que aprendieran a reaccionar ante las penalizaciones y nos montaban 'pollos' enormes. Cuando volvíamos a tierra unos no nos hablaban y otros se quejaban.

¿Es cierto que a partir de esa Copa América, casi por casualidad, le llegó su gran oportunidad?

- Tuve suerte porque cuando se estaban disputando las finales de la Copa se puso en marcha el Circuito Audi MedCup, que fue uno de los mas importantes del mundo de monocascos. En principio el Oficial Principal de regatas iba a ser el estadounidense Peter Reggio, pero estaba en las finales de la Copa y me llamó Nacho Postigo, uno de los organizadores del Circuito y me ofreció el cargo. Fui afortunada porque si hubiese empezado Reggio nadie hubiese pensado en mi.

¿Qué es lo más complicado para un Oficial Principal de Regatas?

- He estado en 46 países deLo más difícil es cuando llegas a un campo de regatas nuevo y el personal local no entiende bien el tipo de regatas que vas a hacer. No comprenden que necesitemos una distancia mínima de recorrido y en lugares distintos donde ellos montan habitualmente sus campos de regatas y no cabe el que tengo que montar yo; es una lucha continua, pero al final se impone mi criterio; no hay más remedio.

¿No lo son las salidas de las flotas de veinte o treinta barcos a la vez sobre una línea imaginaria?

- Es otra de las grandes complicaciones, pero últimamente estamos intentando tener más precisión en esas cosas porque los equipos llevan 'drones' tienen más información y yo solo tengo mi ojo, que no es poco, y sobre un barco que se mueve. Yo no digo que no sea precisa, pero las embarcaciones ya lo son cada día más.

Ud. ya estaba nombrada como oficial principal de regatas para los Juegos de Tokio 2020. ¿Era lógico el aplazamiento a 2021?

- No había otra opción dada la situación por la pandemia del COVID-19.Todos los oficiales ya estábamos nombrados para este año y seremos los mismos en 2021. Para nosotros no cambia casi nada, pero para los deportistas puede ser beneficioso para unos y perjudicial para otros. Algunos estaban ahora en el mejor momento, especialmente los españoles, y espero que estén mejor el año próximo.

Los de Tokio serán sus terceros juegos olímpicos. Iba a serlo también a Río 2016 pero un triste tema personal lo impidió. ¿Me lo quiere explicar?

- Iba a serlo en Río 2016, pero el fallecimiento de mi marido Pablo Arandia, regatista de alto nivel, el 21 de julio de 2016, me obligó a renunciar. Ha sido el golpe más duro de mi vida y por años que pasen no lo olvidaré nunca. Tenía al mejor crítico en casa. Me guiaba cuando yo tenía dudas y creo que aún me guía.

Y ahora está su otro gran amor su hija Iris de cinco años...

- Por ella tiré adelante, pero al tener una niña tan pequeña tuve que hacer mucho esfuerzo para parecer feliz a los ojos de mi hija. Ella me necesitaba. Yo mantuve el tipo muy bien, pero ahora se me está haciendo muy duro, por años que pasen cuesta superar algo así.

Ud. vive ahora en Valencia y esta pandemia hace que este más con ella al no haber competiciones. ¿Cómo lo lleva?

-La verdad es que este año estaba muy preocupada porque pensaba que no podría estar mucho tiempo con mi hija, aunque alguna vez viene conmigo, por estos compromisos, -también es Oficial Principal de Regatas del Circuito Mundial 52 Súper Series- y ahora estoy veinticuatro horas al día con ella por el confinamiento. A veces pienso que como puede ser que esteé mandando a regatistas de talla mundial como Terry Hutchinson, Ed Baird o Vasco Vascotto , la única que me monta `pollos' que no puedo controlar es mi hija.