Rahm entrena en Arizona: "Llevo una vida lo más normal posible”

El PGA Tour regresa el 11 de junio. El Charles Schwab Challenge en Fort Worth (Texas) pondrá a funcionar el circuito norteamericano. Jon Rahm tiene ganas de retomar las rutinas. Cuando se suspendió la actividad marchaba segundo del ránking mundial, por detrás de Rory Mcilroy. Se está ejercitando con normalidad, es una de las ventajas del golf, que no supone ningún contacto físico ni proximidad con el oponente. “Las seis primeras semanas no pensé mucho en golf, no me preocupé por objetivos. Una vez que teníamos cierto calendario, ya puedes concentrarte en lo que tienes que hacer y llegar a punto para jugar lo mejor posible”, comenta.

La evolución del coronavirus le ha ido cambiando los planes. Al principio se hizo a la idea de que iba a parar un mes, "luego pensé que dos y tres; las cosas han ido cambiando y es una situación muy difícil para todos”. En Arizona, estado en el que reside, se puede entrenar sin restricciones pese a la pandemia. “Los campos de golf no han cerrado aquí. El gobernador cree que es una actividad esencial y hemos tenido oportunidad de jugar durante todo este tiempo”, explica en una entrevista a ETB. No obstante, Rahm, alertado por las noticias que le llegaban desde España, prefirió permanecer en casa: “Me tomé seis semanas libres sin jugar, sobre para poder hablar con la familia por videollamada. Y al ver que lo llevaban tan bien allí, empecé a crear un plan de entrenamiento. En el aspecto físico, he hecho gimnasio desde el principio seis días a la semana. Y después de seis semanas, empecé a entrenar también el golf. Llevo una vida lo más normal posible”.

Sobre las consecuencias que puede traer la pandemia, señala que “es difícil qué decir sin meterme en política, porque no quiero entrar en cosas que pueden cambiar o que deberían cambiar en todo el mundo”, si bien a nivel personal se encuentra “mucho más concienciado" de lo que hace.