Revolución Ricardinho
Jugadores y técnicos bendicen la llegada del crack portugués a Francia. Sus partidos con el ACCS París serán televisados en Portugal.
Ricardo Filipe da Silva Braga (34 años), más conocido como Ricardinho, ha revolucionado el fútbol sala francés. Y eso que todavía no ha aterrizado. El ACCS París, su nuevo hogar cuando abandone las filas de Movistar Inter al término de esta temporada, ha apostado por la figura del mago portugués, seis veces nombrado mejor jugador del planeta, para favorecer el crecimiento de este deporte en Francia, ya que actualmente es todavía una disciplina alejada del profesionalismo.
La Federación Francesa de Fútbol (FFF) lleva años invirtiendo tiempo y dinero en el fútbol sala. Pero la D1 (primera división), todavía con carácter amateur, está dominada por un solo equipo, precisamente por un ACCS que este curso suma pleno de triunfos en doce jornadas. Y ahí es donde entra la figura de Ricardinho como atracción de estrellas mundiales a corto plazo para el resto de equipos. "He recibido mensajes de jugadores de El Pozo, Barcelona, y otros equipos, queriendo saber sobre el proyecto, si pueden venir", confesó el portugués en L'Equipe la pasada semana.
La fiebre por Ricardinho se ha instaurado en la capital francesa incluso antes de su debut. En el último encuentro de liga del ACCS, el pabellón Asnières-sur-Seine registró un aumento de asistencia. La expectación es máxima y, por ello, Federación francesa y lusa han llegado a un acuerdo para televisar los partidos en Portugal. El despliegue es total y así lo reconoció el propio O Mágico en AFP: "Creo en el proyecto del ACCS. Estoy convencido de que será grande: vamos a atraer más jugadores, aficionados, televisiones y patrocinadores. La Final Four es un camino muy largo, pero nos damos tres años para alcanzar el techo de Europa".
Suena a hazaña, pero si de algo sabe el ACCS es de superar imposibles. Desde su fundación como club en 2014 ha protagonizado una de las mayores gestas en la historia del deporte francés: cinco ascensos de categoría de forma consecutiva. Durante ese trayecto de liga regional hasta la D1, el conjunto parisino conquistó la Copa de Francia en 2017 mientras militaba en tercera división, hito que ningún otro club con estructura regional ha conseguido.
Kevin Ramírez fue pieza clave en aquel título. El internacional francés llegó al equipo el año anterior como el primer profesional que se unía a las filas del ACCS, por lo que sabe apreciar mejor que nadie el fichaje del crack portugués. "Es fenomenal para la liga y el club. Hablan de nuestro equipo y nos viene bien a todos. La liga crecerá con su llegada. La duda es ver si el equipo estará preparado para tener este tipo de jugador. Hay que ver cómo evoluciona el club a partir de ahora, pero estamos muy contentos", confesó Ramírez a AS, además de afirmar que estas incorporaciones son fundamentales: "Aquí el fútbol sala era un hobby, pero los jugadores extranjeros aportan el conocimiento del juego más específico y la experiencia".
Y no sólo los jugadores bendicen el fichaje de Ricardinho, también los técnicos. Así lo corrobora Marcelo Serpa, actual entrenador del Toulouse y uno de los primeros técnicos procedentes de la LNFS en llegar a Francia en el año 2010: "Es una gran noticia para el futbol sala francés. Su llegada va a dar mucha publicidad y calidad a la liga. Cuando tienes grandes jugadores en buenos equipos es cuando más te motivas para competir. El resto de equipos tienen donde fijarse para luchar contra gente mejor y eso es lo que hace subir el nivel". Tras contar con embajadores como el futbolista Franck Ribéry, el ACCS espera alcanzar una nueva dimensión con Ricardinho en sus filas. Y también lo ansía el fútbol sala francés.