Tokio 2020, en alerta por amianto
El Ayuntamiento de Tokio ha tenido que lanzar un programa para contrarrestar el amianto que ha aparecido en la piscina que albergará el waterpolo.
La ciudad de Tokio tiene muy avanzadas las instalaciones para los Juegos Olímpicos del próximo verano (del 24 de julio al 9 de agosto), pero se han encontrado con un duro revés. El Ayuntamiento de la ciudad japonesa ha tenido que programar varias medidas para contrarrestar la presencia de amianto en la cubierta del Centro Internacional de Natación Tatsumi, en el que se disputará las competiciones masculinas y femeninas de waterpolo.
La presencia del material se descubrió en 2017, cuando se inspeccionó para comenzar la obras de renovación del pabellón (inaugurado en 1993). En ese momento se descubrió que había amianto en la parte aislante de las vigas situadas en el techo del recinto, pero no creyeron necesario tener que tratarlo, algo que han revertido debido al riesgo que la sustancia (puede provocar cáncer, según la OMS) tiene para el organismo. Una vez finalicen los Juegos Olímpicos y Paralímpicos (del 25 de agosto al 6 de septiembre), el pabellón será reconvertido en una pista de hielo permanente.