Saúl 'Canelo' Álvarez (Guadalajara, Jalisco, 1990) es el boxeador más mediático del momento. El mexicano ha logrado ocupar el lugar de Floyd Mayweather (ya retirado) como punta de lanza del deporte, y aunque de momento no ha logrado económicamente alcanzarle, está en camino de hacerlo. En octubre de 2018, Álvarez firmó el contrato más lucrativo de la historia del deporte en ese momento: ganaría 365 millones de dólares por once peleas durante los próximos cinco años. Superó así a Giancarlo Stanton, que rubricó un acuerdo con los Miami Marlins por 13 años y 325 millones de dólares. El púgil ha sido superado este 2019 por el también jugador de beisbol Mike Trout, quien ha llegado a Los Ángeles por 12 años a razón de 360 millones de dólares.

Pese al montante total, el poderío mediático de Canelo se demuestra mirando año a año. El de Guadalajara ganará 73 millones al año, muy por encima de los 31,6 de Trout y los 25 de Stantos (ya no los cobra debido a que en 2017 le rescindieron el contrato). Además, a ese dinero hay que sumarle los patrocinadores externos, ya que el acuerdo es solo por los derechos televisivos. Por su fuese poco, Álvarez finalizará ese contrato con 33 años, por lo que dependiendo de su estado físico en 2023 podría rubricar un nuevo acuerdo todavía más lucrativo. Es el rey y mueve millones cada vez que se sube al ring. No hay duda.


Fuera de las mareantes cifras económicas, deportivamente también es un referente, aunque en este apartado hay boxeadores por delante en los rankings libra por libra. Su calidad es innegable, pero no convence a todos por su estilo y muchos le critican asegurando que perdió las dos peleas contra Gennady Golovkin. Pese a todas las habladurías, su legado está sobre la mesa y en la actualidad es campeón mundial WBC (denominado Franquicia, título que tiene una serie de beneficios) y WBA del peso medio y campeón mundial WBA Regular (un interinato del organismo) del peso supermedio. Además, en su carrera ha sido monarca también en el peso superwelter. Este sábado intenta la cuarta corona en su cuarta división. Quiere ser monarca del semipesado y para ello se enfrenta a Sergey Kovalev.

Canelo Álvarez, joven prodigio: fue campeón mundial con 20 años


La historia de Canelo es la de la precocidad. Apodado así por su cabello pelirrojo, Álvarez debutó como profesional en octubre de 2005, cuando tenía 15 años, 3 meses y 11 días. Su carrera se fue desarrollando sin prisa, pero sin pausa. Así, en menos de tres años (marzo de 2008) tenía 18 peleas como profesional (con un registro de 17-0-1) y se enfrentó a Gabriel Martínez, púgil con idéntico récord por su primer título: el WBA Fedecentro del peso welter. Lo ganó antes del límite y siguió su camino fulgurante. Dos peleas de rodaje mas y empezó un camino de oro. Llegó su debut en Estados Unidos y de 15 peleas peleó por un título (de diferentes organismos y entidad, todos intermedios) en 13 de ellas. Compaginaba México y Estados Unidos, llamaba la atención y con solo 20 años y 6 meses le llegó la oportunidad para ser campeón mundial.

Era el momento de confirmar todo lo que se había hablado de él. Se presentó en el Honda Center de Anaheim (California) con un récord de 35-0-1. Era su quinta pelea en Estados Unidos y le esperaba, Matthew Hatton, que había sido campeón de Europa y tenía 13 peleas y 9 años y dos meses más. Estaba en plenitud, pero sucumbió a los puntos. Canelo era campeón mundial. Su carrera siempre ha estado bien llevada, por ello sumó cinco defensas contra rivales que fueron aumentando de nombre. Así, tras derrotar a Shane Mosley y Josesito López se citó con Austin Trout en abril de 2013. Era el campeón WBA del superwelter. Lo que significaba su primera unificación era posible. La logró y llegó el primer gran combate de su carrera.

Floyd Mayweather subió de categoría para enfrentarse con él. Por aquel entonces, 'Money' el rey absoluto del boxeo. Tenía en ese momento 36 años y un registro de 44-0. Canelo, por su parte, se enfrentó contra el mejor con solo 24 años y 10 meses. Perdió por decisión mayoritaria y aunque fue un tropiezo le hizo crecer. Ese momento hizo también pensar a Canelo en seguir aumentando de peso y ahí comenzaron sus cambios, ya que desde el 2014 ha peleado en cuatro categorías diferentes (contando la pelea de este sábado). En noviembre de 2015 superó, con nota otro examen, y es que derrotó a Miguel Cotto para proclamarse campeón mundial del peso medio por el WBC. Un cinturón que defendió en mayo de 2016 frente a Amir Khan.

Año 2016: el inicio de la rivalidad con Gennady Golovkin

Tras esa victoria, Canelo pronunció por primera vez el nombre de Gennady Golovkin. El WBC ordenó la pelea entre ambos, pero el mexicano quiso más tiempo y renunció al cinturón, lo que provocó un conflicto entre ambas partes que se solucionó más adelante. Tras ese cambio de planes, Álvarez regresó al superwelter para ser monarca WBO al noquear a Liam Smith. Después barrió a Chávez Jr. en un duelo de mexicanos para ir a por Golovkin. Tras la victoria ante su compatriota se hizo oficial el pleito, que acabó con un controvertido nulo. Nadie se pone de acuerdo todavía en el resultado. Eso generó mas expectación entre ambos y la revancha despertó mucho morbo... pero un positivo por clembuterol de Álvarez echó por tierra todos los planes. Todos los organismos y la USADA aceptaron las explicaciones del púgil, que achacó el resultado a una intoxicación alimentaria. Solo seis meses de castigo y un año después del primer duelo hubo la secuela.

Esta vez el triunfo si fue para Canelo, quien mostró una actitud muy diferente en la previa. El equipo del kazajo le atacó por su positivo en la previa y en el pesaje casi llegan a las manos. De nuevo entre polémica, se llegó a las cartulinas y en esta ocasión el triunfo para el mexicano. Desde ese punto, septiembre de 2018, Álvarez ha manifestado su intención de "hacer historia". Lo que le llevó a desafiar al campeón WBA Regular, Rocky Fielding, antes de terminar el año. En 2019, tras derrotar a Jacobs y unificar tres de los cuatro títulos del medio (el de la IBF lo perdió al no cerrar un pleito con el retador oficial y Golovkin lo acabó ganando), decidió ir por otro reto: ser monarca del semipesado.

Ahí se encuentra, a las puertas de enfrentarse a Segey Kovalev, un pleito en los que sus cualidades podrían lucir mucho. Canelo es un gran contragolpeador, es rápido de cintura y preciso con sus puños. En la primera pelea ante Golovkin le faltó cadencia, algo que rectificó en sus peleas posteriores. Ahora, dos pesos por encima de su división 'natural', Canelo se mide a un hombre mucho más pesado que él. Sus característicos golpes con los upper a diferentes alturas, sobre todo en la zona de flotación del ruso, pueden ser clave. Canelo es un puñal ahí y debe demostrarlo. Ocurra lo que ocurra, seguirá siendo el más mediático. Saúl Álvarez es 'The Special One'.