Las jugadoras del Rocasa saben pelear contra la adversidad
Han ganado la Supercopa de balonmano pese a no poder contar con Silvia Navarro y la lesión de Sayna Mbengue, ambas internacionales
El Rocasa canario, campeón de Liga y de la Challenge Cup la pasada temporada, ha iniciado la nueva campaña con su segunda Supercopa, al ganar en la prorroga (32-31) al Bera Bera donostiarra, el club de referencia español en esta década. Para el equipo canario la victoria representa una inyección de moral importante de cara a la liguilla de clasificación de este fin de semana para lograr un billete para la próxima Champions League.
Bien se puede decir que el Rocasa es un equipo, un grupo unido que se supera ante las adversidades. Antes de viajar a Eibar la portera internacional de las Guerreras, Silvia Navarro, una cuarentona tan joven que tutela desde su puesto al equipo y a la Selección, se bajó del grupo: un cólico nefrítico la retuvo en casa. Pues bien, Ana Belén Palomino, nueva en el Rocasa, que llega desde el Castellón, descendido, fue una de las heroínas del encuentro.
Sayna Mbengue, la mejor lateral derecho de la pasada temporada, una de las nuevas internacionales del Rocasa, se lesionó al principio de la segunda parte tras haber sido la clave de su equipo en la primera mitad. Pues bien, una veterana como la cubana Lisandra Lusson, que hace dos años sufrió dos tromboembolismos y pusieron en duda su futuro deportivo, tomó la la responsabilidad ofensiva para marcar el penalti para forzar la prórroga y ganar el encuentro. Este martes Sayna sabrá el alcance de su lesión,