Estados Unidos fue demasiado flojo para los Hispanos júniors
El debut en el Mundial de Pontevedra fue un mero entrenamiento para los jugadores de Isidoro Martínez, relajados en la segunda parte
Treinta años después Pontevedra acoge otro Mundial júnior. De aquel que ganó la URSS y España fue segunda, se ha venido hablado durante tres décadas, porque surgieron estrellas imposibles de eclipsar por el paso del tiempo. Lideraba a los soviéticos un tal Talant Dujsebaev, por ejemplo. o Masip, o Garralda, o Urdangarín. Pues bien, de esta Selección española también se vuelve a esperar mucho aunque el debut no es un buen examen para sacar conclusiones: 34-13 (21-5) a Estados Unidos, el rival más flojo del grupo.
En la primera mitad se vio a la España eléctrica, al contragolpe letal en tres pases, a la inspiraciones colectiva e individual, con goles para recordar de Tarrafeta, de Mamadou Diocou o de Gonzalo Pére, y paradas espectaculares de Ramírez. Luego, tranquilidad, nada de riesgos, cumplir el expediente.
Estados Unidos, que tiene trece jugadores en distintas ligas de Europa y Asia, y sólo tres en equipos del país, y que la dirige un cubano que iba para médico, Julio Sainz, digamos que es un equipo demasiado primario para el juego en esta categoría. Carece de la velocidad necesaria para adelantarse a las acciones, con lo que genera un peligro físico para los rivales. De esa manera se dejó pasar el tiempo y a pensar en Túnez, el jueves en Vigo (21.00, Teledeporte).