El Palma Futsal gana al Barça Lassa y fuerza el desempate
Los baleares pusieron las tablas en la eliminatoria tras vencer en Son Moix por 3-1 al Barcelona Lassa. El lunes, en el Palau, se decidirá el finalista.
El Palma Futsal derrotó este viernes al Barça Lassa (3-1) y logró igualar la serie de las semifinales del playoffs por el título de la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS), que se decidirá el lunes en el Palau Blaugrana en el tercer partido. El quinteto balear, que ya eliminó al actual campeón, el Inter Movistar, impuso su mayor pegada ante un Barça Lassa desdibujado desde el principio, e impotente ante un adversario que le superó en todas la facetas del juego.
El meta internacional del Palma Futsal Carlos Barrón se convirtió en la gran figura de su equipo al impedir, con sus paradas, las acciones ofensivas más peligrosas de los azulgranas. En el inicio, el quinteto balear supo frenar el ataque visitante y marcar en la primera y única ocasión clara que tuvo (min. 14) tras un grave error defensivo que no desaprovechó Nunes. El Barça Lassa tuvo el balón en su poder más tiempo que el Palma Futsal, pero solo en contadas ocasiones encontró espacios en la defensa local. Y cuando lo hizo, sus jugadores tampoco estuvieron atinados, como en el minuto 10, cuando Esquerdinha falló en un mano a mano con Barrón.
El gol de Nunes fue providencial para que los jugadores que dirige Antonio Vadillo impusieran el ritmo más conveniente para sus intereses, es decir, ralentizaron el juego y evitaron pérdidas tontas de balón. El Palma Futsal sabe como tratar a los "grandes" en su pista, llena hasta la bandera, como lo ha demostrado esta temporada en la que solo ha perdido tres partidos en Son Moix. En la segunda parte llegó el segundo mazazo para el Barça con el gol de Paradynski (min. 22) tras otro error defensivo que obligó a los azulgranas a una remontada que, por lo que estaba ocurriendo en la pista, parecía muy complicada.
El Palma Futsal no se conformó con el 2-0 y buscó una ventaja más amplia en el marcador ante un rival, que tuvo que arriesgar en busca del gol que le metiera en el partido. Eloy Rojas aumentó la cuenta goleadora de los baleares ante el delirio de sus aficionados, que habían convertido Son Moix en una olla a presión, aunque el Barça respondió con un gol de Marcenio. El resultado ya no se movería más, en parte, porque Barrón se encargó de impedir todas las ocasiones que tuvieron los azulgranas, que arriesgaron al máximo en los últimos minutos jugando con portero-jugador. La eliminatoria por un puesto en la gran final se decidirá el lunes en el Palau Blaugrana.