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HALTEROFILIA | EUROPEOS

Lydia Valentín, subcampeona de Europa: no pudo con Naumava

La española arrancó la competición colgándose el oro en arrancada, pero no pudo con 136 kilos en dos tiempos, marca que la bielorrusa Naumava sí levantó para ser campeona europea.

Lydia Valentín, subcampeona de Europa: no pudo con Naumava
Federación Española Halterofilia

Lydia Valentín no pudo revalidar su título europeo en los continentales de Batumi (Georgia) en una apretada y tensa competición donde la berciana inició su participación con oro en arrancada, pero no pudo certificar su victoria en los dos tiempos. Su fallo en 136 kilos le dejó a las puertas del campeonato, tanto en esa modalidad como en el total olímpico que decide a la vencedora, y se tuvo que conformar con la plata. La bielorrusa Darya Naumava, subcampeona olímpica, sí logró alzar esos 136 y se coronó como reina de la nueva categoría de 76 kilos (la que también se disputará en Tokio). Halterófila de un país, Bielorrusia, que estuvo castigado por sus repetidos casos de dopaje y que volvía al Europeo.

El podio

HALTERÓFILA ARRANCADA DOS TIEMPOS TOTAL OLÍMPICO Darya Naumava (Bie) 106 136 242 Lydia Valentín 108 133 241 Patricia Strenius (Sue) 101 132 233

Cierto es que Lydia sí había podido con Naumava en el pasado Mundial, el campeonato que marcó el regreso de los países sancionados, sin embargo esta vez la berciana no estaba “en su mejor momento, corta de preparación”, como había avisado. Sí fue superior en arrancada, con 108 kilos, aunque no pudo en su intento de alzar 110. A pesar de ello, le valió para colgarse el oro en esta modalidad con dos kilos más que Naumava. Otra aspirante, la francesa Gaelle Nayo Kenchatke, era bronce, pero dejaba una de las imágenes de la jornada ya que en su tercer intento se fracturaba el codo y tenía que ser retirada en camilla entre gritos de dolor.

En dos tiempos, el duelo era entre Naumava y Lydia, a pesar de que la sueca Patricia Strenius (otro fenómeno de este deporte en su país) intentaba poner emoción aunque sólo para lograr el bronce. Naumava, que empezó asegurando 126 kilos, no falló ni en 131 ni en 136, marca que le trasladaba toda la presión a Lydia. La española había cumplido con 130 en el primer intento y 133 en el segundo, que celebró con rabia. “Hubo un momento en el que pensé que podía volver a ser campeona”, reveló luego. Pero en ese último intento, no pudo con los 136 y se quedó a solo un kilo del título: “Al final estoy feliz, no venía tan bien y he logrado tres medallas más en el camino a Tokio”.