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NATACIÓN

Jimena Pérez acompaña a Mireia al Mundial en el 1.500

La badalonesa se ha colgado el oro con una marca de 16:13.20 mientras que la madrileña también rebajó la mínima al marcar 16:19.32.

Actualizado a
Jimena Pérez, durante un entrenamiento en el CAR de Sierra Nevada.
Pepe VillosladaDIARIO AS

La tercera jornada del Open de Sabadell prosiguió con la misma tónica que las dos anteriores, unas marcas bastante discretas de todos los nadadores, y dos mínimas válidas para el Mundial de Gwangju. En este caso sí son definitivas, pues la prueba de 1.500 libre se nada en formato de final directa. Jimena Pérez, que fue segunda por detrás de Mireia Belmonte, obtiene el billete y se convierte en la tercera nadadora clasificada con plenos derechos, después de la propia badalonesa y Marina García (que debe ser al menos segunda en la final de esta tarde, algo que se antoja lógico salvo contratiempo).

La prueba cerró una descafeinada sesión. Mireia nadó en solitario desde el primer 50, y Jimena siguió su estela. Ambas, compañeras de entrenamiento con Fred Vergnoux, están acostumbradas a este tipo de carreras en las sesiones de trabajo. Y se lo tomaron tal cual, pero con público. No tuvieron excesivos problemas en rebajar los 16:24.33 que se pedían. Mireia fue primera con un tiempo de 16:13.20 mientras que Jimena Pérez acabó por detrás con 16:19.32. La marca de la nadadora de la UCAM es la séptima del año. En el Mundial de Budapest, de 2017, Mireia fue plata por detrás de Katie Ledecky.

Con suficiencia en las pruebas de fondo pero sin estar al nivel en las explosivas, Mireia Belmonte ha nadado muy lejos de sus registros en las eliminatorias de los 200 estilos, también marcada por la final del 1.500 de después. Con un registro de 2:19.42 se metió tercera en las semifinales de esta tarde, con el mejor tiempo para Catalina Corró (2:15.44).

La jornada matutina también dejó el gran tiempo de Miguel Ortiz-Cañavate en los 50 braza, 27.84, a solo seis centésimas del récord de España. Mientras que Hugo González pasó segundo a las semifinales de los 200 espalda, lejos de la mínima, con 2:01.48.