España barre a Rusia y jugará por un cuarto Europeo seguido

España jugará el 30 de marzo la final del Europeo de rugby. De ese Europeo raquítico de cuatro equipos de los que tres (si Alemania y Holanda no han mejorado muchísimo respecto al año pasado) tienen un nivel netamente inferior a España, que este sábado se paseó en semifinales, en el Central de Madrid, ante Rusia.

Ellas, como no, todo el mérito del mundo. La nueva hornada tiene frescura y descaro, compiten donde les dejan y demostraron una vez más que ya no son futuro, sino presente. Lejos de acomodarse ante un rival que saben peor, desplegaron todo su potencial e hicieron sangre, aunque no sirva como reivindicación de ningún tipo porque el club ya está formado y ellas no son bienvenidas desde hace años, pero nunca está de más recordarlo. 

Quince minutos duraron las rusas. Los que tardó España en trenzar por primera vez un buen ataque. El oval viajó de costado a costado hasta en dos ocasiones y acabó en las manos de María García, que hizo el contrapie y se coló. Fácil. Ocho minutos después Losada salía de una melé, arramplaba con todo a su paso y posaba el segundo. Y en el 31' Salinas culminaba otra buena transmisión de España. Rusia era un juguete roto en manos de las Leonas. Un equipo que placa blando, tiene problemas evidentes en la circulación del oval y los apoyos y pone a su medio melé a sacar touches. Se fueron al descanso 19-0 abajo y sin oler prácticamente la almendra. 

En la segunda parte, más de lo mismo. España, en su campo, ante su gente y con esa sensación de superioridad, no iba a frenar. Alameda encontraba el costado de una abierta libre de nuevo en el 44', en el 55' Requena sacaba la moto para posar su primer ensayo con España al recibir una descarga de Patricia García tras una gran ruptura de ésta, en el 71' Echebarría veía la enésima puerta abierta en la cortina defensiva de las Osas y la aprovechaba y, en el 72', Castelo cerraba la cuenta. 

Siete ensayos como siete soles, uno menos que en la semifinales del año pasado ante Alemania, y la sensación de que es difícil que alguna de las otras dos semifinalistas aparte a España de su séptimo título continental, que buscará en el Central de Madrid el próximo 30 de marzo.