Salma Paralluelo: "Aún es pronto para decidir entre fútbol y atletismo"
En una entrevista a EFE la deportista analizó cómo compagina sus entrenamientos de fútbol, donde es campeona del mundo sub-17, con los de atletismo, donde logró mínima para Glasgow.
El palmarés de Salma Paralluelo no entiende de edades. Con 15 años es campeona de Europa y del Mundo de fútbol sub-17 y pieza clave en su equipo en Zaragoza. Cuando deja el balón, se calza las zapatillas para brillar en las pistas de atletismo. Su último logro en el nacional de Antequera, un bronce y la plusmarca española sub-18 en 400 lisos, le concedió un billete directo al Europeo absoluto de Glasgow.
El fugaz encuentro del pasado miércoles entre la atleta turolense Ester Lahoz con Salma Paralluelo marcó el inicio de esta aventura europea. Ambas se fundieron en un fuerte abrazo que culminó con las palabras de la veterana deportista: "mucha suerte, lo vas a hacer genial", un mensaje que suscitó una sonrisa en el rostro de la joven para afrontar todo lo que se avecina.
Los nervios son gajes del oficio, un compañero más antes de cada prueba que la zaragozana, con solo 15 años, es capaz de controlar para impedir que le jueguen una mala pasada. Lo demostró en Antequera con la plusmarca nacional sub-18 de los 400 lisos y con su clasificación para Glasgow.
Ahora, en tierras escocesas, quiere reducir todavía más su marca en esta prueba, superar los 53,33 que selló la propia Lahoz como mejor tiempo en Aragón, algo que, si lo consigue, "será todo un honor", y regresar con un buen sabor de boca de su primer Europeo absoluto.
"No voy con ninguna expectativa, lo único que quiero es competir, intentar alcanzar un buen puesto y, si puede ser, reducir mi marca aún más. Si lo logro estará genial y si no, tocará seguir trabajando", comenta Salma Paralluelo a Efe.
El nacional de Antequera fue el debut de la "gacela", así la apodan sus compañeras, en la categoría absoluta, y ya sabe la dificultad que supone el "salto"desde juvenil. No obstante, su condición de novata no le impidió cosechar buenos resultados. "Venía de Zaragoza con un tiempo de 55,35, en la semifinal quedé primera y tuve una buena calle para la final. Lo que sucedió no me lo esperaba para nada, y salí muy contenta especialmente porque conseguí la mínima para Glasgow", reconoce.
Su espléndida actuación fue una hazaña casi imposible. Solo una persona, la marchadora noruega Kjersti Tisse, logró acudir a un Europeo con 15 años recién cumplidos y tres décadas después, la zaragozana sigue los pasos de la deportista nórdica, sumando así un nuevo logro en su currículo.
Este campeonato será "totalmente diferente"a lo visto, mucho "más serio", con atletas de "muy alto nivel" que buscarán mejorar sus marcas, explica. Sin embargo, esa "inexperiencia" en la alta competición no es algo que le incomode; su férrea mentalidad la mantiene con los pies en el suelo, y el cariño de sus familiares y amigos son todo el empuje que Salma necesita para estar centrada cada día en mejorar y afrontar los desafíos.
El calendario marcaba 'atletismo' durante todo el mes de febrero e inicios de marzo, algo que le ha impedido correr sobre el césped portando el escudo del Zaragoza Club de Fútbol Femenino, club de la Segunda División española, en los últimos compromisos ligueros.
Y es que además de destacar sobre la pista, la joven es una pieza clave para el conjunto aragonés y también para la selección española, con la que consiguió la corona europea y mundial en los Campeonatos de Europa y del Mundo sub-17 disputados en el año 2018.
El equipo zaragozano es líder de su grupo, candidato al ascenso a la máxima categoría (Liga Iberdrola) y Salma es la perla más prometedora, y también la más joven, de la plantilla que comanda Cristian Aleza. Una jugadora "muy madura, con mucho desparpajo y con mucha competitividad" a pesar de su juventud, a la que hay que "mimar mucho, intentar primar por su estado físico y mental, y, evidentemente, no coartar su progresión como deportista", destaca el técnico para Efe.
Su agenda apenas tiene huecos en blanco, hace malabares para compaginar los estudios con el fútbol y el atletismo. Los lunes, miércoles y viernes, se calza las botas para saltar al césped a entrenar con sus compañeras de equipo en los campos de la Federación Aragonesa de Fútbol. Los martes y los jueves, cruza el paso de cebra que separa estos campos del Centro Aragonés del Deporte para acudir a las pistas de atletismo y se ejercita a las órdenes de Félix Laguna, su entrenador del Alcampo Scorpio 71, el club con el que compite.
"Es complicado compaginar todo porque tengo horarios muy fijos, con deporte todos los días, y muy poco tiempo para estudiar, pero los dos deportes me gustan mucho y no quiero renunciar a nada por el momento", cuenta.
Pasan los meses y el momento de tomar una decisión se acerca. ¿Fútbol o atletismo? Ésa es la cuestión que reconcome a Salma. Aún no lo tiene decidido, y sabe que dentro de poco deberá decantarse por una disciplina.
En los estudios, sin embargo, lo tiene claro. "Una vez que acabe la ESO, quiero estudiar el bachillerato de Humanidades y Ciencias Sociales para, después, aunque esto no es 100 % seguro, hacer algo de interpretación".
Dentro de la incertidumbre que desprende su futuro deportivo, Salma vislumbra un sueño: llegar a unos Juegos Olímpicos. No se sabe ni en qué disciplina ni cuándo se producirá, pero tal y como dice la 'gacela', irá "a tope" para conseguirlo. Del 1 al 3 de marzo, Glasgow puede ser el primer capítulo internacional de una carrera que ya apunta tantas realidades como promesas.