Los goles de Cañellas sacan el billete preolímpico para España
En la primera parte ante Egipto la defensa de la Selección fue tan tibia que peligró la séptima plaza. Se arregló con intensidad en la segunda mitad
Se acabó el Mundial para España con el aprobado de conquistar la plaza para el preolímpico con la séptima plaza, la peor posición en los cinco últimos mundiales, y más siendo esta Selección la actual campeona de Europa. El 36-31 (17-18) ante Egipto permite superar el expediente.
La victoria sirve para regresar a casa con la sensación de haber hecho los deberes, pero deja abiertas muchas dudas porque el juego no ha estado a la altura de lo que se presumía. La primera mitad ante Egipto fue una demostración de lo que se ha mostrado frente a las grandes selecciones: una defensa poco contundente, y un juego muy elaborado pero sin balones al pivote. Aginagalde se fue al banquillo sin un lanzamiento, sin una posibilidad de marcar, sin un balón que tocar.
Que España no mandase al termino de la primera hora lógicamente producía sarpullidos de impaciencia. Eso sí, se volvió del vestuario con un paso al frente en la defensa, con más intensidad de todos, con más piernas y con más ganas, y a los 10 minutos, España ya había cambiado el rumbo del partido con dos robos de balón con gol sin portero del extremo Gómez, y luego con Cañellas tirando del equipo con sus goles desde ocho metros (9 de 10 lanzamientos).
Y también entró en juego el pivote, ahora Figueras, con cuatro de seis lanzamientos (uno al larguero), con lo que España ya generó peligro desde todas las posiciones para acabar con una victoria clara y tranquila ante Egipto, que de la mano de David Davis, con Hussein Zaky y Venio Losert de ayudantes (también conocidos en la Asobal) ha logrado que el país africano sea el mejor de los no europeos en el Mundial.