El Mundial de Alemania y Dinamarca que arranca este jueves es una aventura muy seria por la que apuestan los alemanes para promocionar un deporte del que presumen de tener la mejor liga mundial, con más de una decena de pabellones comparables a los de la NBA, más que ningún otro país en Europa, Y para promocionar este Campeonato la Federación germana se ha volcado en buscar alicientes para los aficionados del país. El último, una de las figuras más internacionales del país, el gigante Dirk Nowitzki, campeón de la NBA en 2012.